El Ayuntamiento de Lena quiere asegurar una convivencia pacífica entre los osos y los ganaderos del concejo. El alcalde, Ramón Argüelles (IU), anunció ayer que solicitará una partida de fondos europeos tras conocer la noticia de que los plantígrados ya cruzan con asiduidad la autopista del Huerna y pueden estar asentados en los montes del municipio. "Si antes convivían en paz, no hay razón para pensar que ahora surgirán problemas", destacó Argüelles.

Es necesario, según el regidor, atajar cualquier problema que pudiera surgir. Es por eso que se dirigirá a la Unión Europea, en colaboración con entidades conservacionistas, y reclamará la ejecución de un proyecto ambicioso: "Los ganaderos tienen que realizar su labor con la mayor facilidad posible y los plantígrados tienen que pasar por el monte sin tropezarse con humanos o ganadería doméstica", destacó el máximo dirigente local.

Los planes del gobierno local pasan por la construcción de abrevaderos, plantaciones de frutales en las zonas oseras y programas de concienciación para los ganaderos y otros sectores implicados. "Tenemos la puerta del ayuntamiento abierta para todos los que quieran participar en el proyecto", destacó Argüelles.

La Fundación Oso Pardo (FOP) ya se puso a disposición de los ayuntamientos de Lena y Aller hace unas semanas. El presidente de la entidad, Guillermo Palomero, había destacado la necesidad de trazar un plan con los dos concejos del corredor interpoblacional (la franja de montañas que conecta las poblaciones de Oriente y Occidente) para aprovechar sin riesgos el "tirón" turístico de los plantígrados.

Presencia de plantígrados

Una idea que Ramón Argüelles aplaude, pero sin olvidar otros factores que considera "prioritarios". Entre esas premisas está que los ganaderos del concejo aprendan a desarrollar su labor en zonas transitadas por plantígrados. "No queremos tomar medidas cuando ya sea tarde, empezaremos a trabajar cuanto antes", aseguró ayer el regidor de Lena.

Las zonas con mayor tránsito de oso son los montes de Xomezana de Arriba y Tuiza. Hace unos meses, un ganadero denunció la muerte de una res en el valle de Zurea a causa del ataque de un plantígrado. La Consejería de Desarrollo Rural y Recursos Naturales. Lo mismo ocurrió en el pueblo de Reconcos.

El último registro de paso de osos por el municipio tuvo lugar hace sólo dos semanas. Un ganadero avistó un ejemplar macho en la zona de la Col.la Propinde, en el entorno de la Carisa. Dio el aviso a la Guardería del Principado y también a la Fundación Oso Pardo. Los expertos confirmaron la presencia del animal, a través de una recogida de restos. "Cada vez será más frecuente y es un motivo de satisfacción. En los años noventa nos dirigíamos rápidamente hacia la extinción de la especie", aseguraron desde la entidad conservacionista.