No le falta razón al inquieto y querido músico Vaudí Cavalcanti al señalar que este nuevo proyecto que se trae entre manos (y entre cuerdas, metales y percusión) invita a no quedarse quieto en la butaca. Lo que está pidiendo a gritos "Groove Brasil" es una grabación en directo y escenario abierto para hacer saber al público que el calor y el color del Brasil más setentero y ochentero (anterior en el tiempo incluso) no tiene fecha de caducidad y puede ser entregado a día de hoy con total credibilidad.
Enérgicos estuvieron sobre las tablas de la Casa de la Cultura de Mieres el sábado quienes acompañaron a Vaudí: Sil Fernández (guitarra y voz), Sam Rodríguez (teclados y coros), Agustín Lara (trompeta), Oscar Santos (bajo), Leo Duarte (batería) y el propio Vaudí (voces, guitarras). Se echó en falta para algún rapeado al mierense Imanol Núñez que había sido padre de gemelos poco antes de la actuación. Son causas mayores; cómo no?
Lo que agrada de este cálido y vivo proyecto es la acertadísima selección de temas clásicos del funk, la samba-rock o el rock propiamente dicho de ese gigante universo sonoro brasileño. Sin caer en tópicos, muchos de esos temas o sus grandes autores parecían permanecer adormecidos en el baúl de los recuerdos. Desempolvarlos y darles su toque clásico (de sexteto funky-rock al uso) acierta a hacerlo muy bien Groove Brasil.
Inicio -pronosticando hora y media de diversión por delante- abierto con metales para regalar a Tim Maia ("Do leme ao pontal"), con teclados y percusión para la obra de Ed Motta ("Vamos dançar"), guitarra eléctrica sedosa para Aiyê ("Qué bloco é ese?), o el grupo al completo para "W-Brasil" y "Paz e arroz" del gran Jorge Ben y "De frente pro crime" del irreverente Joao Bosco. De ahí en adelante todo un múltiple repertorio para las voces, canciones (a dúo, en portugués e inglés) e instrumentos magistralmente empastados para seguir con más veteranos nombres como Gomes "Jackson do Pandeiro" Filho ("Sebastiana"), los bellísimos y pausados versos de "Aquel abraço" de Gilberto Gil o Al Green y su inmortal "Let´s stay together".
De ahí hasta el remate también se fueron intercalando nuevos grandes que recuperan en el mismo Brasil a sus maestros como lo hacen Ellen Oléria (de quien ya se disfrutó en Oviedo hace un par de años) y sus "Linhas de Nazca", Papas da Lingua ("Pensando nela"), Diogo Nogueira ("Me leva") con no menos viejos veteranos como Djavan ("Samurai"), Tim Maia de nuevo ("Descobridor dos sete mares") y el rock final "Eu bebo sim" de Elizeth "A Diva" Cardoso. Clásicos sin nostalgia. Groove Brasil les ha puesto vida nueva. Para esta noche y otras tantas más que han de llegar de funk, samba y rock para regalar.
