Si algo va a caracterizar a esta primera prueba de fertilidad de las hermanas osas, eso va a ser la seguridad. Ayer una veintena de veterinarios, biólogos, miembros de la guardería y de la FAO vigilaron de cerca los primeros contactos entre los animales, como se aprecia en la imagen de la izquierda. Durante el próximo mes y medio, una docena de personas cuidarán el desarrollo del proyecto las 24 horas del día. Además, el cercado estará vigilado por cámaras y existe un protocolo de actuación para intervenir si fuera necesario. El proyecto sigue generando gran expectación. Ayer, sin ir más lejos, varios colegios disfrutaron de este primer encuentro durante su visita al cercado desde la senda del oso, como se refleja a la derecha, informa V. D. PEÑAS.