Ricao (Quirós),
Roberto F. OSORIO.
Los ayuntamientos de Quirós y Teverga siguen sin ponerse de acuerdo para marcar los límites que les separan y tampoco han conseguido llegar a una solución durante el último encuentro celebrado, que tuvo lugar la pasada semana, para dar por zanjado este asunto.
El puerto de Ventana, primer hito de separación entre los dos municipios, fue el lugar elegido para celebrar este encuentro. Tres concejales de cada concejo acompañados de los secretarios municipales y vecinos se reunieron para intentar dirimir sus discrepancias.
El origen de este problema fronterizo viene dado por un mapa del Instituto Geográfico Nacional (IGN) que marca la separación por puntos de aguas vertientes, lo que perjudica a ambos concejos. Teverga pierde así una amplia zona en los lugares llamados Veiga de Afuera y Veiga de Adentro, en la zona de Sobia. El concejo quirosano se queda, según este documento, sin la zona cercana al puerto de Ventana incluyendo la zona de Trobaniello, con su capilla. Mientras que Quirós reconoce que los pastizales de Sobia pertenecen a Teverga este municipio no hace lo mismo con los pastos de Ventana.
Los dos ayuntamientos ya habían realizado un encuentro el año pasado para intentar llegar a un acuerdo pero las posturas eran muy distantes y parece que siguen lejanas a llegar a una solución que deje conforme a ambas partes. En este último intento por marcar los verdaderos límites que unen y separan a estos dos concejos, el Ayuntamiento de Teverga toma como referencia los mapas del IGN, incorrectos, y un documento de la Dirección Regional de Montes donde se establece que los pastos de Monte Grande Bis son compartidos entre las parroquias de Ricao y la tevergana de Páramo. Quirós, por su parte, defiende su postura basándose en un pacto de límites de 1927 firmado de acuerdo entre los dos concejos y en el que se establece la línea completa de separación desde el mojón de La Violona en Sobia hasta el Bocarón de Ventana. Este documento es el único válido ya que los posteriores, dos, no fijaban ninguna línea completa; de hecho uno de esos acuerdos sólo fija el primer y último de los hitos, y el otro, que data del año 196,8 sólo acuerda cuatro de ellos, partiendo de Ventana.
Según el Ayuntamiento quirosano Teverga pretende hacerse con los pastos privativos de la parroquia de Ricao con un documento que había sido impugnado por Quirós hace más de cuarenta años; el monte público El Grande, que comprende una gran masa boscosa de la zona de Páramo llegando hasta los límites entre concejos. Desde ahí hasta las cumbres se encuentra otro monte, Grande Bis, que está en terreno quirosano y donde siempre hubo manejo ganadero exclusivo de los vaqueros de Ricao. Según explican los vecinos de Ricao, detrás de este asunto se esconden «intereses económicos de ventas de pastos por parte de Teverga», apuntan indignados.
Tras un nuevo intento de acuerdo Teverga y Quirós han decidido que sea el Principado quién decida cuáles son los verdaderos límites entre los dos municipios. Para ello van a remitir al Instituto Geográfico Nacional y al Principado un dossier con las propuestas de modificaciones y alegaciones, con el fin de que, de una vez por todas, se realice una nueva línea de separación de modo unilateral sin contar con los dos ayuntamientos y que se levante de manera objetiva sin dejarse influir por ningún tipo de interés.
Quirós,
R. F. OSORIO
El puerto de Ventana, como todo paso de la Cordillera hacia las tierras leonesas, fue un lugar de tránsito de personas y mercancías a ambos lados de las fronteras provinciales. Cerca de allí se encuentra Trobaniello, un lugar de devoción mariana. Históricamente está detallado en la tradición oral y documental desde hace varios siglos.
Según la historiadora Belén González Collado, que hizo una tesis sobre el «camino de las reliquias» y la época medieval en el concejo quirosano, este lugar tiene carácter sagrado desde tiempos prehistóricos pues allí hay tumbas megalíticas. La Iglesia edificó aquí una ermita que contaba además con una venta y una fragua. Por aquí pasaron las reliquias de la Cámara Santa camino del Montsacro.
El topónimo le viene dado a este enclave, según la leyenda, por la aparición dentro de un truébano o colmena de abejas de una Virgen que escondieron los cristianos para salvarla de una invasión árabe. Los sarracenos pasaron por aquí en los primeros años del siglo IX. La imagen en cuestión es de talla románica y se conserva en el interior de la iglesia de Ricao.
El archivo de la Catedral alberga amplia documentación sobre obras y otras vicisitudes del albergue de peregrinos y viajeros desde 1683. Actualmente la Asociación Campu Faya de Ricao celebra cada 15 de agosto una fiesta en este lugar.
El catastro del marqués de Ensenada (1752) menciona este lugar, al igual que el catastro de Madoz (1850) como terreno perteneciente al concejo de Quirós.
