Peñaflor (Grado),

Lorena VALDÉS

Para la localidad moscona de Peñaflor, 2009 es un año de cambios. A la inauguración del apeadero de Feve se suman otros proyectos importantes que ilusionan a los vecinos de este núcleo que, como tantos otros del concejo, sufre un progresivo éxodo de su población. El primero, la mejora en la carretera de la localidad desde la iglesia hasta la rotonda de Peñaflor, con la construcción de aceras a ambos lados de la calzada y mejora de la iluminación, ya está en marcha. Su inversión de 265.000 euros ha sido financiada con una partida del fondo de inversión local. El plazo de ejecución de esta obra es de tres meses y diez días, por lo que está previsto que a finales de octubre o principios de noviembre los trabajos ya estén finalizados.

Uno de los objetivos del Ayuntamiento moscón es regenerar urbanísticamente toda la travesía de la carretera N-634 a su paso por la villa. Para ello, el gobierno local llevará mañana a Pleno la aprobación de la solicitud al Ministerio de Fomento de la reversión de la travesía. Unos 3.800 metros que van desde la rotonda de Peñaflor hasta la de la Barraca. «Queremos dotar esta travesía de unos servicios acordes con los tiempos», afirmó el concejal de Urbanismo, Alejandro Patallo.

La carretera N-634 sufrirá una transformación completa en su remodelación para mejorar los accesos a Grado y al polígono industrial de La Cardosa. Esta otra actuación afecta a una longitud total de 1.350 metros, un tramo situado entre la actual rotonda de Peñaflor y el puente de entrada a Grado sobre el río Cubia.

El Consistorio también tiene previsto el asfaltado de las calles de Peñaflor. Esta reforma interior de la localidad también ha sido recibida con alegría por la asociación vecinal.

Los vecinos confían en que en esta época de buena racha la localidad logre también la rehabilitación de su iglesia. Por pedir que no quede.