Pola de Siero,

Manuel NOVAL MORO

Ahora que la plaza de abastos de Pola de Siero ha recobrado su esplendor tras la rehabilitación y que el nuevo complejo cultural suma edificios significativos a la localidad, queda por definir el futuro de otro de los monumentos de la Pola, el paraguas diseñado por Ildefonso Sánchez del Río que da cobijo a la estación de autobuses y cuyo entorno experimentará un importante cambio una vez que se lleve a cabo el soterramiento del ferrocarril.

El paraguas, hecho de hormigón, tiene una estructura octogonal en forma de pirámide invertida, y se construyó en los años setenta como parte del nuevo mercado nacional de ganado, que hasta entonces estaba en Les Campes. Había otros paraguas de menor tamaño que no se conservaron cuando se trasladó de nuevo el mercado al emplazamiento que ocupa hoy en día. Sí se conservó otra estructura que, brillantemente rehabilitada por el arquitecto José Benito Díaz, es hoy el hogar del pensionista, y en un futuro próximo acogerá la nueva estación de autobuses.

Sólo quedó en pie, y no sin dificultades técnicas, el paraguas de mayor tamaño. El problema es que a su lado se levantó el edificio de la actual estación de autobuses, una construcción no demasiado afortunada, y además el paso constante de vehículos impidió que el espacio se convirtiera en una verdadera plaza pública, con uso vecinal, como ha ocurrido con paraguas de menor entidad de otros lugares. Oviedo es un buen ejemplo de ello.

El Ayuntamiento de Siero está estudiando la posibilidad de derribar el edificio de la actual estación de autobuses, una vez que el servicio se traslade a su nueva sede. En los planes entra también la opción de derribar el edificio de la antigua Policía Nacional. En caso de que así fuera, cabría la posibilidad de emprender una gran actuación en torno al paraguas, encaminada a fomentar el uso peatonal de la plaza. Si se lleva a cabo, se recuperará para los vecinos un espacio que hoy dista mucho de ser acogedor. La ambición del Ayuntamiento es recuperar el oeste de Pola de Siero, hoy muy degradado, y esta plaza podría convertirse en uno de sus emblemas.