Grado,

Lorena VALDÉS

En Grado, llueva o no llueva las fiestas de prao están siempre a salvo. Y es que los hermanos moscones Roberto y Víctor Álvarez Rodríguez han inventado una nueva modalidad de verbena en su local de copas en las que el público nunca se moja ni pasa frío. Su establecimiento se transforma una vez al mes, desde febrero, para celebrar una romería, a cubierto, en la que no faltan la música de orquesta, el reparto del bollo preñao ni el vino ni los clásicos sorteos de gallos o cabras. La villa moscona saca ventaja este año al calendario festivo del verano, que está a punto de comenzar en el resto de Asturias.

Ni «bakalao», ni pop, ni rock. La juventud moscona prefiere la música de orquesta y lo demuestra en las fiestas de prao, que un viernes al mes organiza el bar Music, en las que los romeros bailan y cantan temas tan populares como «El polvorete», «Te regalo amores» o «Paquito el chocolatero», hasta bien entrada la madrugada. El teclista local José Luis Francos se encarga de amenizar una verbena que nunca tiene que suspenderse a causa del mal tiempo y en la que siempre le piden otra y otra para exprimir el jugo a la noche.

«Queríamos hacer algo diferente para animar los viernes y la respuesta fue buenísima, la gente nos pregunta continuamente cuándo hacemos una nueva fiesta de prao», explica Víctor Álvarez.

Para reponer fuerzas, en el local se reparten cada noche de verbena unos 400 bollos preñaos acompañados de un vaso de vino, sin necesidad de presentar el tradicional vale, ya que son gratis. La decoración es otro de los puntos fuertes de estas fiestas. «Llenamos el bar de banderines de Asturias y cubrimos el quiosco de la música con un toldo; además pegamos por las paredes los clásicos carteles de las fiestas de prao. Hay clientes que vienen con camisetas de fiestas de Grao de hace años», afirma Roberto Álvarez.

Los hosteleros ya piensan en la próxima romería, que se celebrará el 23 de mayo, coincidiendo con la fiesta de la Segunda Flor, en la que añadirán nuevos atractivos. «Habrá campeonato de tute a partir de las cinco de la tarde para enlazar con el vermú y tenemos guardados fuegos artificiales, así que igual los tiramos».

Más de uno se anima en las fiestas de prao a subirse al escenario. El primero, Roberto Álvarez, que durante años formó parte de la orquesta moscona «Paupers» y que siempre tiene que interpretar el tema favorito del público, «Me lo dijo Pérez». «Lo pasamos fenomenal, da gusto ver a gente de diferentes generaciones pasándoselo bien en el mismo lugar», concluye el empresario. En Grado, la fiesta está asegurada.