Pronga / Beifar (Pravia),
V. DÍAZ PEÑAS
Pronga y Beifar son dos pequeños núcleos rurales separados únicamente por el río Nalón. Desde las casas de un pueblo se ven sin dificultad las de sus vecinos. Eran dos núcleos bien comunicados gracias a una pasarela peatonal sobre el cauce, pero ahora se han distanciado notablemente: la riada del pasado junio dejó muy tocada la pasarela y los vecinos tienen que dar un importante rodeo para poder cruzar a la otra orilla. Por eso piden que se arregle el puente cuanto antes.
Los vecinos de estos dos pueblos todavía están esperando a que se reparen los daños ocasionados por la gran riada del pasado mes de junio. Desde entonces tienen que convivir con una vega repleta de troncos y de suciedad que nadie ha retirado. El paso de la riada es patente aún hoy en las vegas de estas dos localidades y también en sus poblaciones. Desde la inundación han dejado de tener contacto pedestre. Ahora, los dos kilómetros que era necesario cubrir entre Beifar y Pronga se han convertido en más de ocho, que deben hacerse por la carretera.
Como explicaban ayer los propios vecinos, el puente está casi intransitable y apenas nadie lo cruza por miedo a su estado. Los tensores resultaron afectados y la plataforma no aporta seguridad. No pueden cruzar el puente y, por tanto, tampoco pueden acceder a las fincas y vegas que tienen al otro lado del río. Pero hay más. La falta de pasarela también complica la vida diaria de los vecinos de ambas márgenes.
«El otro día, por ejemplo, tuvimos que ir a un funeral a la iglesia de Pronga. Con la pasarela hubiésemos llegado caminando en poco tiempo. Pero, como está inservible, tuvimos que dar un rodeo con el coche», explicaba ayer Jose Higinio Carrió, vecino de Beifar. Y es que habitualmente los vecinos de este núcleo acuden a misa a Pronga. Pero los de Pronga también se comunican con sus vecinos de Beifar para tomar el tren. Antes podían llegar al apeadero caminando y ahora lo tienen que hacer en coche.
La agrupación de Izquierda Unida de Pravia se reunió recientemente con los vecinos de una y otra margen para escuchar sus quejas. Tras este encuentro, IU hizo suyas las críticas vecinales y ha instado al Ayuntamiento a que lleve a cabo una actuación inmediata. La agrupación entiende que el puente quedó inservible tras las inundaciones y, por ello, reclaman la reparación «urgente» tanto del puente como de sus accesos, igualmente afectados por la riada. IU de Pravia aprovechó para pedir una mayor atención por parte del gobierno local hacia a estos núcleos. En este sentido, la coalición ha solicitado que se limpien y se arreglen las vías de comunicación y ha pedido un mayor cuidado de las fincas, que, como explicaron, actualmente presentan una situación de abandono y de suciedad.
