Prendes,

Braulio FERNÁNDEZ

La Delegación del Gobierno en Asturias ha aprobado la ejecución de una subestación eléctrica de potencia máxima, 400 kilovatios, en La Reboria, entre las parroquias carreñenses de Prendes y Pervera. La aprobación se ha refugiado en la figura de la utilidad pública, dando por buena la declaración de impacto ambiental presentada. La subestación, la segunda del concejo tras la de Carrió, cuenta con un amplio rechazo. Al frente del mismo se encuentra el propio Ayuntamiento, que ya ha manifestado su intención de presentar alegaciones en el plazo habilitado, esto es, los próximos 30 días.

El gobierno municipal insistió ayer en su oposición al proyecto de Red Eléctrica Española (REE). «Estamos en contra de la instalación porque consideramos que existen alternativas menos lesivas para el concejo que la de La Reboria», apuntó la concejala de Urbanismo y Medio Ambiente, Melania Álvarez, que aseguró que el gobierno «está trabajando intensamente en la preparación de alegaciones».

REE ha encontrado en la declaración de utilidad pública la fórmula para llevar a cabo sus planes sin contar con la aprobación de los ayuntamientos.

El Ejecutivo local ha contactado con las diversas asociaciones de vecinos de las parroquias afectadas, no sólo por la subestación eléctrica, que serán directamente Prendes y Pervera, sino también otras como Logrezana o Ambás, que se verían afectadas por el tendido eléctrico que surgiría de la estación camino de Cardo. En esta última parroquia REE plantea realizar otra subestación más, con la misma potencia que la de La Reboria.

La subestación de Cardo también se encuentra en información pública, al aprobar el Estado tanto el proyecto como su declaración de utilidad pública y su declaración de impacto ambiental.

Según indicaron desde el gobierno municipal, el proyecto es rechazado por la mayoría de los vecinos del concejo, lo que motiva que el Ayuntamiento vaya a liderar el frente común contra la iniciativa, teniendo en cuenta además la experiencia que ya se tiene. En esta otra parroquia del concejo carreñense, los vecinos aún están pendientes de ser trasladados a otro lugar del municipio, al encontrar muchas dificultades para sobrevivir en el entorno de la subestación, aunque también de otras instalaciones industriales que se encuentran junto a ella.

La instalación de La Reboria tendría la máxima potencia posible, 400 kilovatios, y extendería además una línea recta de conductos eléctricos entre La Reboria y Logrezana, lugar a partir del cual se bifurcaría hasta Ambás y hasta Zanzabornín. Una vez allí conectaría con la subestación de Cardo, para hacer llegar el tendido hasta las inmediaciones de Avilés.