Santo Adriano,

L. VALDÉS

Las «casas rodantes» tienen su paraíso particular en la Senda del Oso. El concejo de Santo Adriano ha sido el primero de Asturias en permitir a los usuarios de autocaravanas pernoctar en los aparcamientos públicos del municipio. Una normativa municipal abre hueco en los valles del Trubia a unos vehículos cuyos propietarios se quejan de tener «muchas dificultades» con ellos para moverse y descansar en la región. Quirós ha seguido el ejemplo de sus vecinos y también ha pasado a permitir la pernocta de las autocaravanas en su territorio.

«Estamos muy satisfechos con la iniciativa», proclaman los miembros del Club de Autocaravanistas de Asturias, de reciente creación y que cuenta con unos 40 socios. La entidad rindió homenaje ayer al Ayuntamiento de Santo Adriano «por ser pionero en potenciar este turismo sobre ruedas».

Los osos «Paca», «Tola» y «Furaco» no durmieron solos este fin de semana en Santo Adriano. A escasos metros de su cercado, en el aparcamiento de Buyera, hizo noche más de una treintena de autocaravanistas de Asturias, el País Vasco, Cantabria y Castilla y León, los cuales reivindicaron «la necesidad de que el Principado habilite áreas de estacionamiento para su uso y disfrute, tras prohibir el año pasado el aparcamiento libre de estos vehículos». El presidente del Club de Autocaravanistas de Asturias, Isaac García Palacios, alertó de que «la estricta y obsoleta normativa del Gobierno regional, que debe ser reformada, está potenciando que el turismo de autocaravana se desplace a Galicia, donde existen muchas más facilidades para realizarlo».

Los participantes en esta concentración de caravanas aprovecharon su estancia en Santo Adriano para recorrer la Senda del Oso y visitar el museo etnográfico de Quirós, así como para disfrutar de la contundente gastronomía de la zona. Asimismo, en la mañana de ayer se reunieron con el alcalde del municipio, Carlos de Llanos, (PSOE), y con otros miembros de la Corporación municipal para mostrarles su agradecimiento «por regularizar la pernocta de los autocaravanistas».

El regidor, por su parte, afirmó que, «lejos de la mala imagen que muchas veces se ha dado de ellos, quienes practican el turismo de caravana son personas normales que han invertido mucho dinero en sus vehículos y que tienen derecho a disfrutar de ellos con libertad como en el resto de la Unión Europea».

Los autocaravanistas demandaron que se creen áreas con servicio de agua y desagüe en puntos estratégicos de la región y definieron la Senda del Oso como «un paraíso natural para un turismo tranquilo. Esperamos que el ejemplo cunda y que las autocaravanas encuentren su sitio en Asturias», concluyeron.