Candás,

Braulio FERNÁNDEZ

El biólogo y técnico de la Dirección General de Pesca José Antonio Pis Millán está considerado uno de los mayores especialistas de la región en el estudio de los cetáceos. Más aún, su pasión por estas especies marinas le hace la persona más indicada para abrir las VII Jornadas de ecología marina de Candás, organizadas por el Club de Actividades Subacuáticas El Delfín y que cuentan con el patrocinio de LA NUEVA ESPAÑA.

Las ballenas son animales marinos que gozan de gran popularidad, y de las especies más comunes pero también de las más raras se encargó Pis Millán en la conferencia celebrada en el salón de actos del centro polivalente de Candás. El biólogo repasó algunas de las especies menos frecuentes en el Cantábrico, como la orca, de la que dijo que «no sólo la conocemos por varamientos, sino también por avistamientos de ejemplares vivos, como uno realizado en Gijón, cerca de San Lorenzo, a cien metros de la costa».

«Hay pocos cetáceos que se acerquen a la costa», añade no obstante Pis Millán, que señala el golfo de Vizcaya como el más frecuente de los emplazamientos para las especies más difíciles de observar. Él ha visto dos orcas varadas, «una de ellas era una madre, de cinco metros de largo, que murió en el parto, con el feto a medio salir». Entre otros avistamientos de especies poco comunes en el Cantábrico, señala también los rorcuales.

Por desgracia, «aquí no sucede como en Canarias que puedes salir en barco a ver cetáceos, porque no son poblaciones estables, aunque en verano es más probable verlos», explica. Si alguien lo intenta, a lo mejor tiene la suerte de ver una animal marino de 22 metros de largo, como le tocó a él en el puerto de Gijón a finales de los años noventa del siglo pasado.