Candás,
Braulio FERNÁNDEZ
La nueva Estación Náutica de Candás ya está finalizada y lista para entrar en funcionamiento. Este equipamiento servirá para dar apoyo a las embarcaciones pesqueras y de recreo y contará con una estación meteorológica. Según explicó ayer la concejala de Urbanismo de Carreño, Cecilia Tascón, «la obra ya está entregada al Ayuntamiento, y solo queda incluir el equipamiento interior y realizar la concesión del bar de la segunda planta». Dos flecos que se rematarán en los próximos días, según aseguró, pues «ya se está preparando el pliego de condiciones para su concurso».
La reforma de este edificio, que comenzó hace exactamente un año y que retrasó su final desde el mes de marzo hasta ahora, pretende culminar un cambio de ciclo en el caladero candasín. Además, contará con la primera estación meteorológica del muelle y trata de sentar las bases para que Carreño se convierta en un referente del turismo náutico en Asturias, según apuntan fuentes del gobierno municipal.
La estación meteorológica consistirá en una serie de equipamientos informáticos que tendrán como misión el control del movimiento marítimo, permitiendo que las embarcaciones tengan un adecuado seguimiento durante la navegación y que puedan disponer de toda la información necesaria para realizar su actividad en las mejores condiciones posibles, según explicaron responsables de la concejalía de Urbanismo.
La primera planta del edificio, una vez rehabilitado, contará con un vestíbulo de acceso, una zona de administración, el despacho de la gerencia, un botiquín, lavandería, oficio de limpieza y unos amplios vestuarios para los usuarios de la pesca deportiva y los deportes náuticos del muelle candasín.
A su vez, en la segunda planta, además de la estación meteorológica y del aula, se habilitarán un almacén y otras instalaciones, así como un bar-restaurante, con gestión privada.
Los trabajos han tenido un coste final de 558.735 euros, con cargo al fondo estatal para el empleo y la sostenibilidad local, sobre un proyecto de la Oficina de Gestión Urbanística de la Mancomunidad del Cabo Peñas, que ha sido llevado a cabo por la empresa Basemat Proas 2004.
El edificio estará gestionado, en un principio, por la asociación náutica «Cuatro Vientos», con gran implicación en otras tareas de gestión del puerto, según señaló la concejal de Urbanismo. La elección de la gestión ha sido también una de las causas del retraso en la puesta en funcionamiento del edificio. Además, hubo demoras por la dificultad para rehabilitar la vieja estructura del inmueble, que se encontraba en estado ruinoso, y por otros contratiempos, como los argayos que se produjeron en el cabo de San Antonio durante el invierno.
