En Perlora van a hacer prospecciones en busca de petróleo. Bien. No se me hace tan complicado imaginar la fotografía de la playa de Carranques ennegrecida por el galipote. Hace nueve años. Una mañana de noviembre igualita a la de hoy llegué muy temprano a la playa. El arenal era una tremenda costra negra de varios metros cuadrados y varios centímetros de espesor. El agua tenía tintes de arco iris y las olas escupían galletas negras en cada ir y venir. Eva Cabrera, que entonces era concejala de Cultura, me había advertido, llena de rabia, de lo que me iba a encontrar. La imagen de aquella mañana de un 20-N quedó grabada en la historia de la Ciudad de Vacaciones como una de las más negras de su historia. Los candasinos, especialmente los pescadores, dejaron sus trabajos, dejaron sus quehaceres y se enfundaron en aquellas fundas blancas tristemente famosas. El petróleo dañó mucho a los candasinos, en lo moral, en lo económico, en todo. ¿Puede ser ahora la solución?