Logrezana,

Braulio FERNÁNDEZ

La empresa Reasa, que en el año 2010 realizó una extracción ilegal de 183.000 metros cúbicos de piedra de una finca de Logrezana, ya ha satisfecho el pago de 14.000 euros en concepto de multa al Ayuntamiento de Carreño. Las extracciones, que tenían como destino las obras del puerto de Gijón, se llevaron a cabo de forma ilícita, sin contar con licencia municipal, lo que motivó el inicio de un expediente sancionador por parte del Ayuntamiento de Carreño.

Además, la empresa está obligada a devolver los casi 200.000 metros cúbicos de terreno a la finca de El Cotarón, en Logrezana, de donde los extrajo. Algo que la firma aún no ha podido realizar, según explicaron fuentes municipales, debido a que no cuenta con los aportes de material necesarios. Por este motivo, el Ayuntamiento de Carreño le ha concedido a la empresa una moratoria para que complete los rellenos, que de no producirse derivaría en una nueva sanción.

La empresa informó al Ayuntamiento de Carreño de sus intenciones de devolver los materiales extraídos de la finca de El Cotarón, en Logrezana, tras ser conocedora del inicio del expediente sancionador que se le había abierto. Y es que durante cuatro meses de 2010, esta firma, por mandado de la Autoridad Portuaria de Gijón, llevó a cabo una explotación que supuso no sólo la pérdida de roca y mineral de la finca, sino un trasiego de camiones que, según los vecinos del entorno, suponía en su momento más álgido entre quinientos y mil transportes al día.