Pola de Siero / Villaviciosa,

F. TORRE / M. MENÉNDEZ

La sentencia de la magistrada Belén Alicia López ha sentado como un jarro de agua fría en el seno del PP y del PSOE, contrarios desde el principio a la moción de censura contra el gobierno del socialista Guillermo Martínez, y que han coincidido en señalar que el fallo emitido por la titular del Juzgado de lo contencioso-administrativo número 6 de Oviedo puede lastrar el «pacto antitransfuguismo».

En este sentido, el secretario general de la Federación Socialista Asturiana (FSA), Javier Fernández, aseguró ayer en Villaviciosa que esta situación «fomenta el transfuguismo, que es una lacra para la democracia y que tiene una incidencia mayor en el ámbito local».

Para el líder socialista, «las consecuencias de la sentencia son negativas», ya que Martínez «es un alcalde que no sólo se ha consolidado, sino que tiene el aprecio de la inmensa mayoría de la ciudadanía de Siero». A juicio de Fernández, el éxito de la moción aboca a la «inestabilidad» al cuarto concejo de Asturias. Ahondando en esta línea, el secretario general del PSOE de Siero, Roberto García Morís, ha señalado que «la sentencia avala el transfuguismo, lo que genera inseguridad política y desconfianza ciudadana en la democracia y en las instituciones».

Ya centrado en el ámbito local, Morís entiende que el triunfo de la moción «podría poner fin a una buena gestión en el Ayuntamiento de Siero por parte del PSOE, respaldada por los vecinos», para dejar el gobierno del cuarto concejo en manos de Foro, lo que entiende que «conllevaría una paralización de la Administración local en un momento de crisis, si tomamos como ejemplo el Gobierno de (Francisco Álvarez) Cascos en el Principado». Asimismo, el alcalde de Siero, Guillermo Martínez, confirmó que su partido va a recurrir la sentencia, lo que podría derivar, incluso, en otro vuelco político dentro de unos meses.

Por su parte, desde el PP insisten en que la sentencia «da la impresión de que minimiza los efectos de las modificaciones legislativas operadas para impedir los cambios en los gobiernos locales causados por el transfuguismo», toda vez que los populares entienden que los cuatro concejales del PP que apoyaron la moción de censura «están expulsados del partido».

En este sentido, el PP advierte del riesgo que puede tener, para las corporaciones locales, «que algún partido pueda obtener gobiernos locales al margen de las reglas del pacto antitransfuguismo y del espíritu que manifiesta, de forma clara, el legislador en las últimas reformas que persiguen de manera inequívoca el acabar con conductas de este tipo».