Un fraude aún por resolver

El pescador valdesano Alberto Fernández precintó en La Rodriga (Salas) a las siete menos cinco de la mañana del 1 de mayo de 2011 un ejemplar de 5,8 kilos y 78 centímetros que fue el campanu del año pasado. El salmón se adjudicó por 6.000 euros a una empresa gallega de montajes en la puja celebrada horas después en Cornellana. Un año después, aún se desconoce si el pez es legal.