Santa María de Grado,
Lorena VALDÉS
Mucha palabra y poca acción. Los afectados por la subestación eléctrica de Santa María de Grado sienten que han sido «utilizados como arma electoral por el PP en las dos últimas elecciones municipales», y así se lo han hecho saber en una reunión al alcalde moscón, Antonio Rey, representantes de la Plataforma Pro Santa María. «No están haciendo todo lo que prometieron y lo cierto es que la subestación avanza a pasos agigantados sin que nadie de la Administración local o regional mueva un dedo por remediarlo», explican defraudados desde el colectivo.
Las obras de la instalación proyectada por Red Eléctrica de España (REE) en la localidad de Grado comenzaron el pasado mes de enero después de que el Tribunal Supremo rechazase a finales de 2011 la paralización cautelar de la instalación, solicitada por el Ayuntamiento. Como respuesta, el gobierno moscón -formado por el PP, Aigras y Foro Asturias- presentó un nuevo recurso con el objeto de frenar el proyecto, aprobado en 2005 cuando IU ostentaba el poder en el municipio.
A la espera de que la justicia se pronuncie, Rey les prometió una reunión con Mercedes Fernández, candidata del Partido Popular a la Presidencia del Gobierno del Principado, para abordar una subestación que contó desde el principio con la oposición frontal de los vecinos.
Éstos consideran que la instalación dañará de forma notable el paisaje de una zona de especial interés, como es el caso de los meandros del río Nora y las riberas del río Nalón, y podría acarrear perjuicios a la salud.
Desde la Plataforma Pro Santa María se pide a los políticos de todos los partidos «que dejen a un lado la subestación en sus discursos y que arrimen el hombro para paralizar una instalación con muy graves consecuencias».
