Grado, Lorena VALDÉS

A Carlos García Valverde, flamante ganador del XXI Concurso internacional de cuentos «Valentín Andrés» de Grado, le llegó la inspiración para su relato «El vuelo de una piedra» una noche mientras hacía zapping. En la televisión se sucedían los programas de videntes «que adivinan el futuro de los espectadores a base de sonsacarles información para decirles lo que quieren escuchar» y el leonés dedidió comenzar a escribir una obra protagonizada por «el tío Alonso» que se gana la vida descubriendo el porvenir de sus vecinos en una zona rural sin tener habilidades para ello.

«El cuento narra, a través de su nieto, la historia de este cómico reconvertido con gran éxito en adivino. A pesar de no tener tales facultades, el protagonista se sirve de sus conocimientos sobre la condición humana para labrarse una próspera carrera hasta el final de sus días», explica García Valverde, quien, además del primer premio, dotado con 1.500 euros, ha logrado otra distinción del jurado por su otro cuento, «N de nada».

El ganador, que trabaja en la banca privada y como diseñador gráfico, cultiva su afición por la escritura desde hace más de tres décadas y en este tiempo ha logrado una docena de premios. «Al concurso de Grado ya me había presentado en ediciones anteriores, pero no había logrado ningún premio; sin embargo, este año he hecho doblete», bromea.

Para el escritor, que empleará los 1.500 euros con los que está dotado el premio en «algún caprichito, seguramente un viaje», lo más importante de este reconomiento es «la posibilidad de que la gente lea tus obras». Algo que conseguirá, ya que sus cuentos, al igual que el resto de los ganadores del concurso, se recogerá en el volumen que publica anualmente la asociación cultural «Valentín Andrés», organizadora del certamen.

La entrega de premios, que tendrá lugar en la Casa de Cultura de Grado el próximo 19 de octubre, será la excusa perfecta para que el ganador conozca la villa moscona. «Será la primera vez que visite Grado porque los leoneses, cuando cruzamos la frontera, solemos aprovechar para ir a la playa en verano o a Oviedo», comenta.

Tras el éxito cosechado en el certamen de Grado, el escritor se encuentra inmerso en la preparación de una serie de cuentos sobre trenes y bicicletas que publicará después de verano. «Hay que intentar que la gente se aficione a la lectura porque de los libros siempre se saca algo bueno», concluye García Valverde.