Pola de Siero, F. TORRE

José Manuel Noval Menéndez ya ocupa su lugar en el panteón particular de la Sociedad de Festejos de Pola de Siero. El que fuera oficial mayor del Ayuntamiento de Siero, fallecido días atrás debido a una larga enfermedad, ha sido distinguido por la entidad como Presidente de honor debido a su prolongada labor en favor de las celebraciones de la localidad. Una distinción con la que Noval se une a otros dos ex presidentes ya fallecidos, Dionisio Villa y Antonio Martínez.

La iniciativa responde al deseo tanto del actual presidente de la entidad, Manuel Freije, como del que será su sucesor desde este otoño, Jenaro Soto, quienes coinciden en su positiva valoración de Noval como presidente. «Aparte de todo lo que hizo, en su segundo mandato nos introdujo a una generación en la organización de las fiestas, que fuimos los que seguimos con ellas en los años siguientes», explica Soto.

Co fundador de la entidad en 1961, Noval sucedió al primer presidente, Dionisio Villa, en 1964. Tras dos años de mandato, dejó el testigo en manos de José Manuel Fuente, para retomar la presidencia en 1968, dirigiendo Festejos otros cinco años.

Tras su fallecimiento, y alentado por el propio Soto, Freije tomó la iniciativa para distinguir a Noval, llevando la propuesta ante la Junta Directiva de Festejos, que aprobó por unanimidad, en una reunión celebrada este miércoles, conceder la distinción. Una vez concretada la distinción, Freije se desplazó ayer hasta el cementerio poleso, donde se reunió con parte de los hijos de Noval para realizar una ofrenda floral en nombre de la entidad.