Candás,

Braulio FERNÁNDEZ

Son mujeres de Carreño, tienen más de 50 años -algunas hasta octogenarias- y se han propuesto reírse de sí mismas y hacer reír a los demás. Son «Les Ayalgues», un grupo de teatro que integra a una veintena de mujeres que ocupan parte de su tiempo libre estos días en ensayar una nueva obra que llevarán de gira por Asturias en su tercera temporada en activo.

El regreso se produce tras el parón veraniego. Se han volcado en los ensayos, cuando aún queda más de un mes para el estreno que las tiene en vilo. «El título de la obra no lo hemos decido todavía, eso es lo último, pero ya sabemos que estrenaremos en el teatro Prendes de Candás, cómo no, el próximo 23 de noviembre», explica la presidenta de la agrupación, Aidé Fernández. «Creo que va a ser una obra para que la gente disfrute y se ría desde el preciso instante en que se sienten en sus butacas y hasta que se levanten, llena además de sorpresas», recalca la portavoz de las teatreras.

Los ensayos se desarrollan en el local de la asociación cultural femenina. Esta agrupación surgió en 2011 como fruto de la participación previa de las asociadas en el taller de iniciación al teatro que promovió el Ayuntamiento de Carreño. Actualmente son 18 mujeres.

«El guión está siendo escrito por nuestra directora, Gemma de Luis Noriega, y mientras lo ensayamos nos estamos riendo a mandíbula batiente, así que tiene que salirnos bien, porque la preparamos a sangre y fuego», dice Fernández. Los ensayos tienen lugar los jueves, por la mañana y por la tarde, en diferentes grupos.

Los objetivos de la agrupación, que el año pasado contaron como una de sus actuaciones más memorables la realizada ante los internos del centro de Proyecto Hombre en Candás, pasan por promover la práctica del teatro amateur y difundir en diferentes espacios y lugares el aprendizaje que en materia de teatro adquieren las participantes. Además, se busca favorecer la participación femenina en el ámbito de las artes escénicas, a través de las representaciones teatrales.

«Esto es para nosotras un entretenimiento genial, ejercitamos la mente, nos hace sentirnos felices, pero además hacemos algo productivo, sin dejar por ello de ser humildes», apunta Aidé Fernández.