El mundo de la música tiene muchos juguetes rotos y no malos juguetes. Ha habido muchas personas que se han querido dedicar a esto de la música y pese a tener buenas cualidades lo han tenido que dejar. Además de saber cantar hay que tener suerte y padrinos. Pero lo más importante es el empeño, la ilusión y las ganas. Todas esas cualidades las tiene Pipo Prendes. No ha logrado hacerse rico con la música pero el ahí sigue, trabajando y grabando discos. En unas semanas verá la luz su nuevo trabajo, «Un paso más». Será bienvenido por amigos y seguidores, que son legión. El empeño de Pipo con la música es encomiable y sólo tiene una razón de ser, no entiende la vida sin sus canciones y su guitarra. Pipo le canta a sus amigos, a sus tesoros, Natalia y Claudia, y a sí mismo, y por eso sus canciones emocionan. Si no cantase no sería Pipo, sería uno más de esos hombres de traje gris, un empresario que viaja por el mundo haciendo negocios. Pero él da un paso más y le pone música a la vida.