Villaviciosa,

Mariola MENÉNDEZ

La Comarca de la Sidra, con Villaviciosa a la cabeza, se las ingenia para potenciar su tirón turístico, a pesar de que la crisis ha hecho mella en el sector. La intención es captar al visitante extranjero, así como conjugar la fórmula de ofrecer estancias y experiencias interesantes.

Los empresarios no han cumplido, ni de lejos, las expectativas que tenían puestas en el puente festivo de principios de diciembre, aunque la Navidad parece que no les va a fallar. El gerente de la Fundación de Turismo de la Comarca de la Sidra, Miguel Ángel Naredo, reconoce que «los resultados del puente no fueron todo lo positivos que se hubiera deseado». Ofrece como dato que las consultas realizadas en las oficinas de Turismo cayeron un 25 por ciento con respecto al año pasado. El presidente de la asociación de turismo rural de la Comarca de la Sidra «Folgar», Iván Solares, agrega que tuvieron alrededor de un 20 por ciento menos de clientes. Además, ahora se alojan dos o tres días, cuando en tiempos más boyantes lo hacían cuatro o cinco. Además, quien sale de viaje reduce su consumo, principalmente, en las cenas y alternar, apunta Solares.

Pero lejos de desalentar estas cifras, Naredo considera que la solución es trabajar para atraer público hacia un territorio en el que Villaviciosa con su costa, Prerrománico y actividad cultural es uno de los principales reclamos, además de Colunga y Nava, donde se ubican los museos Jurásico y de la Sidra.

Miguel Ángel Naredo apunta que es necesario «internacionalizar el sector para reforzar el número de visitantes extranjeros», pues en Asturias sólo representan el 10 por ciento. El perfil más habitual de los turistas de otros países llega de Reino Unido, Francia o Alemania y lo hacen en temporada media (primavera y principios de verano).

Pero ¿cómo echarles el anzuelo para que piquen y visiten la Comarca de la Sidra? En la Fundación de Turismo no pierden de vista el Camino de Santiago, pues «en los últimos diez años ha conseguido un flujo turístico interesante», destaca su gerente. En 2011 fueron más de 183.000 las personas que hicieron la ruta jacobea, de las que 17.000 peregrinaron por el camino primitivo y del Norte, que atraviesa concejos como Colunga, Villaviciosa y Sariego. Teniendo en cuenta que el 47% de estos caminantes son extranjeros, Miguel Ángel Naredo considera que «hay un nicho de mercado interesante». Por lo que se han planteado el reto de «modificar sus pautas de comportamiento» logrando que no siempre se alojen en albergues y opten por otros establecimientos turísticos de la zona. El gancho sería ofrecerles algún atractivo para que pernoctasen. Una vez que conocen el territorio, «se convierten en embajadores del destino y pueden regresar organizando una estancia turística al uso», dice Naredo. Tienen que ser «altavoz del destino», insiste.

La otra línea de trabajo que están desarrollando en la fundación es apostar por el turismo experiencial. Es decir, que además del alojamiento se ofrezca al turista la posibilidad de realizar un viaje en globo, realizar un taller de azabache y crear su propia pieza o sesiones de masajes. En este caso, se pretende captar tanto al público internacional como al nacional, con «productos innovadores que tengan buena relación calidad-precio», agrega Naredo.

Donde no se está notando casi la crisis es en el alquiler de casas rurales para pasar la Nochevieja. Quienes más las demandan son grupos de jóvenes amigos que buscan viviendas de 8 a 10 plazas. Su precio ronda los mil euros.