Los vecinos de Oles y Sariegomuerto, en Villaviciosa, en colaboración con el párroco, Manuel Robles, arreglan y sacan lustre a sus iglesias.
Las mejoras en el templo parroquial de Oles eran una demanda perentoria, porque el riesgo de derrumbe de la cubierta obligó a cerrar el edificio hace más de dos años. Por esa razón, la misa del día de la fiesta en honor a Nuestra Señora de la Salud tuvo que celebrarse en la carpa de la barraca. Ahora están encantados, después de que esta semana comenzaran los trabajos en el tejado. "Era una obra muy esperada y hubo un momento en el que pensábamos que era imposible por falta de financiaciación y de apoyos", destaca Jonathan Solares, miembro de la comisión creada para el arreglo de la iglesia.
En una primera fase recuperarán la cubierta y la estructura de madera. Con los 40.000 euros de los que disponen también quieren afrontar el arreglo de las ventanas, colocar un canalón, pintar y afrontar otras mejoras. El Arzobispado aportó 12.000 euros y el resto de la inversión corre a cargo de los vecinos, la comisión de festejos y la parroquia. En una segunda fase adecentarán el entorno del campo de la iglesia.
Jonathan Solares explica que el edificio religioso comenzó a levantarse en los años veinte y se finalizó en los cincuenta. De ahí que la mitad del muro esté construída en piedra y la de arriba, en ladrillo. A José Ramón Fernández Tuero le tocó ayudar a subir la teja siendo un chaval y ahora, a bajarla. Está "contento" porque empiece la obra, aunque ya tiene "ganas de verla terminada". Será dentro de dos o tres meses. "A los vecinos les hace más ilusión todavía el arreglo porque o la construiste tú, o tu padre, o tu abuelo, y la sientes más tuya", sostiene.
Sariegomuerto ha demostrado estar muy vivo. Sus vecinos, con el apoyo del párroco, han limpiado en profundidad su iglesia de Santa María, que también ha sido pintada, y el cementerio. Mañana a las 12 lo celebran con una misa. La iglesia, del románico tardío, está declarada monumento histórico artístico desde 1965.
