El Niño Jesús llegó ayer a la iglesia parroquial de San Félix de Candás portado por varios niños del concejo. Los asistentes a la tradicional misa de gallo, que se celebró en la media noche del martes, siguieron el paso de los pequeños que con velas encendidas rodearon la imagen al mismo tiempo que cantaron villancicos. Gracias a este toque especial, la eucarística resultó muy emotiva, informa M. G. S.
