Una experiencia personal y la constatación de las dificultades para quien no entra en los cánones estéticos establecidos llevaron a la candasina Paula Leal a embarcarse en una aventura singular. Hace un año fundó la tienda on-line "Xubra", especializada en ropa de baño y lencería para mujeres mastectomizadas.
"Después de superar un cáncer de mama hace tres años, al retomar mi vida una vez acabados los tratamientos y olvidado todo el proceso de la enfermedad, me desesperaba porque no encontraba piezas de lencería bonitas y sexis ni bikinis que no parecieran sujetadores o modelos para señoras cercanas a las 90 primaveras", comenta con humor Paula. Al tener una mastectomía, toda la lencería y baño se suele adquirir en ortopedias y la oferta es muy limitada, así que "no encontraba modelos que me gustaran", explica. Sólo aparecían modelos bonitos en webs de Inglaterra, Francia, Estados Unidos o Australia, así que Paula pensó en montar "algo para que todas las chicas en España operadas de mastectomía encuentren estos modelos".
Así que se puso manos a la obra para crear su propia línea de productos y así nació "Xubra" junto con otras dos socias: su hermana Sara Leal y su amiga Cristina Lopes, todas ellas candasinas. Aunque por motivos laborales Paula se mudó a Pamplona hace unos años, cuando decidieron crear la empresa "pensamos lógicamente en emprender en Asturias, planteamos nuestro proyecto y encontramos todo el apoyo para sacarlo adelante, así que nos quedamos encantadas".
Fue toda una novedad porque ninguna de las tres había emprendido antes: Sara trabaja en diseño gráfico, y es ella quien se encarga de toda la imagen corporativa de Xubra. Cristina es trabajadora social y Paula ha trabajado como informática durante los últimos años, lo que hace que formen "un equipo muy bien compenetrado".
La marca vende únicamente online "porque es la manera que nos pareció mejor para ofrecer el máximo de variedad de productos al máximo de mujeres". Para ello trabajan con proveedores que se dedican en exclusiva a la moda para mujeres con mastectomía, la mayoría con de ellos con años de experiencia en el sector y "con un altísimo nivel de calidad en sus productos". Un pilar fundamental de su negocio que se complementa con la máxima de "discreción en el servicio a nuestras clientas: la compra de una pieza de lencería es un proceso íntimo y personal, más incluso cuando has pasado por una mastectomía". Por eso," nuestra idea es que las mujeres puedan probar en casa el modelo o modelos que han escogido con total tranquilidad". Y en caso de que finalmente no les convenza pueden devolver la pieza sin tener que ofrecer ningún tipo de explicación.
El balance de este primer año "es muy positivo", porque, como señala Paula Leal, "hemos trabajado muchísimo, pero también hemos aprendido y nos hemos divertido y, sobre todo, hemos conocido a muchas mujeres estupendas". Además, en el primer año un tercio de las clientas han vuelto a confiar en la marca, lo que "nos hace tremendamente felices y nos empuja a seguir".
