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El Peña Careses participa en un congreso científico en Madrid

El centro poleso y otros dos de Morcín y Posada de Llanes recibirán el premio "Arquímedes" por su trabajo en las aulas

Un ensayo de la representación teatral que pondrán en escena los niños de la Pola y Morcín en Madrid.

Un grupo de alumnos y profesores del colegio de educación infantil Peña Careses, de Pola de Siero, participan los días 25 y 26 de mayo en el sexto Encuentro científico entre niños, maestros e investigadores organizado por el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) en Madrid. La intención del congreso es acercar los mundos de la ciencia y de la escuela, poniendo en contacto a los científicos y a los maestros en ejercicio.

En el congreso madrileño, varios niños del centro poleso harán una representación, junto a un grupo de alumnos del colegio Horacio Fernández Iguanzo, de Morcín, sobre un trabajo científico que han ido haciendo durante todo el curso.

Los alumnos mostrarán el funcionamiento de un sencillo invento con el que se consigue que los niños conozcan los rudimentos de los principios de la termodinámica: la grúa térmica. Cerrando la parte superior de una lata de refresco se coloca un globo al que está atada una pajita, y al calentar el aire, el globo se hincha y levanta la pajita como si fuese una grúa.

Las profesoras Bibiana Arias y Covadonga Parajón, del colegio Peña Careses, habían participado en un grupo de trabajo en Oviedo a través del Centro de Formación del Profesorado. Personal del CSIC impartió un curso a los profesores parar llevar a cabo en el aula la metodología científica.

La aplicación de todas estas prácticas en estos dos colegios asturianos, así como en el de Posada de Llanes, que presentará otro experimento, ha sido reconocida con el premio "Arquímedes". El galardón distingue el trabajo docente a favor de la divulgación y la práctica de la ciencia en las aulas.

El congreso, organizado por la Fundación BBVA y el CSIC, pretende colaborar en la actualización de conocimientos en ciencia y tecnología del profesorado de enseñanzas no universitarias.

Los niños, gracias a esta iniciativa, han conseguido aprender jugando y, además, unos pocos privilegiados tendrán la oportunidad de participar, con cinco años o menos, en su primer congreso científico.

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