Público y protagonistas se marcharon ayer igual de contentos de la antigua fábrica de Ortiz de Candás. El concierto ofrecido por la banda de música local en el emblemático edificio tuvo una gran acogida, pese a la soleada mañana de ambiente veraniego. Cada pieza fue recompensada con una sonora ovación.
En la dirección estuvo, como siempre, un David Moen que se mostró entusiasmado con la interpretación de sus músicos en composiciones como "Mirotzak", de Benito Lerrtxundi, la "Marcha eslava", de Tschaikowsky, y "Mazurca", de Chopin, entre otros, hasta sumar nueve interpretaciones. "Este sitio es especial por lo que significa y siempre nos encanta actuar aquí", declaró el director momentos antes de comenzar el recital.
Moen destacó también la interpretación de tres solos al piano por parte del joven gijonés Juan José Rodríguez, quien demostró unas grandes cualidades con sólo 13 años de edad. "Sinceramente, no me pongo nada nervioso cuando me siento delante del piano", declaró Rodríguez mientras se preparaba para salir al escenario.
Entre los presentes había público de todas las edades, y todos disfrutaron de lo lindo con temas como "Abba Gold", en el cual se fusionaron varias canciones del popular grupo sueco.
"Nunca les había visto y la verdad es que me han encantado", declaró Natalia Fernández, que es muy aficionada a la música y aprovechó una parada en Candás para ver actuar a la banda de música municipal.
