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Candás, frente a frente con su pasado marinero

Más de 140 imágenes reflejo de la vida en la villa hace décadas, cedidas por los vecinos, decoran el puerto local

Candás, frente a frente con su pasado marinero

Cincuenta y cuatro lonas y 141 fotografías decoran las paredes del muelle de Candás gracias a la donación de más de 10.000 imágenes que la asociación cultural "Candás Marinero" ha recibido por parte de los vecinos de la villa. LA NUEVA ESPAÑA ha hecho un recorrido por la exposición para mostrar algunas de las obras que recogen la vida marinera de las gentes de la capital del concejo. Un recorrido por su tradición conservera, por sus embarcaciones, sus pescadores, su puerto antiguo y un sinfín de historias que han conseguido enamorar a vecinos y turistas que estos días pasean por el puerto candasín. Ayer, día de máxima actividad por el desfile acuático de "les coses que floten", había gran expectación en torno a las imágenes.

La exposición, sin fecha de finalización, se ubica a lo largo del muelle local y está compuesta por una serie de lonas en la que están representadas fotográficamente todas las actividades que se desarrollaban entre los años 1900 y 1978. El presidente de "Candás Marinero", Tito Aramendi, y sus compañeros de asociación han estado durante cuatro meses trabajando en una selección exhaustiva de las mejores fotografías que representaran la cultura candasina. "Nos encontramos con más de diez mil fotos, hicimos una primera selección y nos quedamos con 500; de ahí elegimos las 200 mejores y finalmente terminamos escogiendo las 141 fotos que ahora se exponen. Lo único que nos ha disgustado es que en muchas ocasiones las personas que en ellas aparecen salen repetidas, nos hubiera gustado obtener más fotografías de familias diferentes que sabemos que han tenido un papel muy importante para la villa" explica Aramendi.

La exposición cuenta también con la ayuda de Alberto Feijoo Ibaseta, que ha sido el encargado de juntar muchas de las imágenes para crear panorámicas completas de la villa e incluso de confeccionar un montaje de todas las mujeres de la" Paxa".

Lo cierto es que Candás ha recibido la influencia marinera y no sólo por su comercio. Muchos de los pescadores que venían de regiones próximas, como del País Vasco, terminaron asentándose en la villa formando familias con apellidos vascos que se conservan en la actualidad, tales como Alijostes, Aramendi, Mendiguren, Iriberri, Badiola, Karrera, Echevarría o Eizaguirre.

Esta es la tercera vez que el puerto de Candás se convierte en un museo al aire libre. La idea comenzó hace dos años con "Memoria de un pueblo", en el que se expusieron 80 retratos del pintor local Alfredo Menéndez. El año pasado el protagonista fue Antón, un hombre que pese al paso del tiempo sigue siendo recordado, valorado por su arte y homenajeado por sus convecinos. Se expusieron entonces medio centenar de obras que recogían personajes del Candás de antes.

Ahora los protagonistas son ellos, los candasinos y candasinas que lucharon por mantener la tradición marinera, siempre con una sonrisa en la cara.

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