Las hermanas Urruzola fueron las culpables de que ayer, por cuarto día consecutivo, el Teatro Prendes de Candás se llenara con las risas de los más pequeños, con motivo del V Festival Internacional de Títeres que patrocina LA NUEVA ESPAÑA. El espectáculo de objetos reciclados consiguió que niños y mayores aprendieran dos lecciones, la importancia del reciclaje y del compañerismo. Los animales puestos en escena, hechos con cacerolas, botes y otros objetos cotidianos, abrieron la imaginación a los asistentes.
Para algunos era el segundo día que acudían al Teatro Prendes para introducirse en el mundo mágico de los títeres, como Nacho González, de 7 años: "La obra de ayer me gustó mucho, me reí y los muñecos se movían solos". Su madre aseguraba que había puesto gran insistencia en volver a disfrutar de otro espectáculo. "Lleva toda la mañana diciéndome que quería venir, así que no me ha quedado otra que volver a traerlo; la verdad que el espectáculo de ayer estuvo genial, hacía mucho tiempo que no le veía reírse y disfrutar tanto", explicaba Rosario Fernández antes de la función.
Carlos Díez y Yolanda Diana, organizadores del festival, se mostraban ayer muy contentos con los resultados. Sobre todo quisieron agradecer al público que también quiso colaborar con el títere solidario, recogiendo más de 89 kilos de alimentos, que serán donados a la Cruz Roja.
Pero como todos los cuentos, este festival también tiene un final. Será hoy, a través de un documental titulado "Muerto el demonio se acabó la peseta". Su director, Pedro Solla, ha querido hacer un recorrido durante los años de la II República, la postguerra y las ferias gallegas llevando en su barraca "Melodías de España". Un espectáculo de títeres de barriga Verde, típico de Galicia.
