El empresario cárnico Manuel del Busto, propietario de Macelo de Mieres, es el único ofertante que queda en liza para hacerse con la propiedad del Matadero Central de Asturias, localizado en Noreña. Según revelan los trabajadores del macelo, Mafrimargo, la otra empresa que aún resistía en la puja por las antiguas instalaciones de Junquera Bobes, ha sido descartada por el titular del Juzgado de lo Mercantil número 2 de Oviedo, Miguel Álvarez-Linera.
El motivo de que se haya descartado la oferta de Mafrimargo -que ofrecía 1.750.000 euros por el matadero, frente a 1.800.000 euros que oferta Del Busto- tiene una doble vertiente. Según relatan en la plantilla, Mafrimargo no ha presentado las cuentas de los últimos diez años, como reclamaban el juez y los administradores concursales. Pero esto se debe, según parece, a que el propietario de la firma, Julio Enrique Díaz Prado, dio de baja en el mes de agosto la empresa, con el nombre legal de Mafrimargo 5, S.L., y fundó una nueva firma.
Este periódico ha podido constatar que Mafrimargo 5, S.L. fue dada de baja en el Índice de Entidades Jurídicas este verano, tal y como consta en el Boletín Oficial del Registro Mercantil (BORME) del 3 de agosto.
Aunque no están claras las circunstancias en las que se concretó la oferta por el macelo noreñense, todo indica que el resultado de su exclusión es que Manuel del Busto se queda como virtual ganador de la puja por las instalaciones, aunque ahora el empresario tendrá un plazo de unos días, tal y como se acordó en la última vista con el juez, para tratar de concretar con el gobierno autonómico las ayudas que considera necesarias para retomar la actividad del Matadero Central.
Por su parte, los trabajadores -que mantienen la asamblea permanente en las instalaciones desde julio del pasado año, cuando cesó la actividad- se muestran cautos ante la aparente resolución de la puja y afirman que ahora "es el momento en el que las administraciones deben demostrar que de verdad apuestan por el Matadero Central".
