Los hosteleros de Llanera están de acuerdo con la propuesta de la Sociedad de Festejos de Lugo de acercar las fiestas de Santa María al centro de la localidad, para evitar que sigan en declive.

A la presidenta de la asociación de hosteleros, Elena Blanco, le parece bien la idea. "Las fiestas, al final, tienen que ser el resultado de una convivencia entre todos, y que todo el mundo seamos respetuosos con los vecinos, pero los vecinos está claro que quieren que haya fiesta; en lo que compete a la hostelería, imagino que será más atractivo para nosotros cuanto más cerca esté el público, con lo que, siempre y cuando los vecinos estén de acuerdo, estoy completamente de acuerdo".

Respecto al declive de las fiestas, considera que no sólo se trata de su ubicación sino también de la fecha, justo a mediados de agosto, que tiene mucha competencia en localidades importantes del entorno. "Depende mucho de la coincidencia en fechas; competir, como ocurrió este año, con unos fuegos en Gijón el día que empiezan las fiestas es siempre complicado, es David contra Goliat; independientemente de la ubicación, es cierto que ahí tenemos las de perder".

Y no sólo está Gijón, sino también las fiestas de Viella o de La Vega, que hacen que la gente tenga mucho más lugares donde elegir. A todo esto se une "la situación económica, que el consumo de la gente es mucho más bajo".

En opinión de Elena Blanco, sea cual sea la ubicación, no se llegará a las fiestas tal como eran antes, debido precisamente a esta mala situación económica. No obstante, se muestra favorable a que se les dé un impulso: "todo lo que sea una mejora y que el público esté más contento, bienvenido sea, ya sea por el disfrute de todos o por motivos económicos de la hostelería".

Los hosteleros de Lugo, según la presidenta de la asociación, estarían dispuestos a colaborar en la medida de sus posibilidades. "Por el momento no se nos ha dicho nada, no se nos ha propuesto colaborar ni se ha esbozado siquiera cómo podríamos hacerlo, nosotros el servicio lo damos como siempre, cada uno en su establecimiento", aseguró.

Pero "en el momento en que se nos pueda decir cómo colaborar estamos abiertos a apoyar con un soporte gastronómico mayor que el que veníamos haciendo, o con otras actividades que puedan resultar atractivas", adelantó.

Las fiestas de Santa María se celebran el fin de semana después del 15 de agosto en la localidad, y la Sociedad de Festejos quiere frenar la caída de la asistencia de gente que se está apreciando en los últimos años.