La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) denunció ayer la falta de vigilancia de los trabajadores públicos del centro de menores Miraflores de Noreña a raíz de la huelga indefinida iniciada el viernes por los diez guardias de seguridad del centro, en protesta por sus condiciones laborales.

El sindicato recuerda que en el centro hay en régimen de internamiento casi una veintena de menores, que han protagonizado numerosos incidentes como fugas, disturbios y agresiones a trabajadores. Por ello, acusan al Principado de "abandonar a su suerte" a los trabajadores del centro que desde el viernes ven expuesta su integridad física por la falta de personal de seguridad.

Por ello, CSIF solicita que la administración regional tome medidas urgentes al respecto. "Es algo intolerable y la dirección general de Justicia y Seguridad debe garantizar a seguridad e integridad de sus propios trabajadores", manifiesta la delegada sindical de CSIF en Bienestar Social, Coloma García Rubio.