Pablo Pérez tiene 35 años. Licenciado en Biología por la Universidad de Oviedo, trabaja como comercial de seguros. A los 17 años comenzó a militar en Andecha Asturias y desde 2011 es concejal en Noreña y portavoz del grupo Conceyu Abiertu (2 ediles en una corporación de 13).
-¿Cómo valora el gobierno de IPÑ y Foro?
-Bueno. Si me preguntan antes de que se perdiera el plan de empleo, hubiese respondido diferente. Ahora la nota que doy es de regular y siendo generoso. En lo que concierne a la comunicación, diligencia en las cosas pequeñas y democratización del ayuntamiento estamos muy satisfechos.
-¿Qué cambios perciben entre la gestión actual y la anterior?
-En el mandato anterior se bloquearon todas las mociones. Había que meterlas por urgencia sistemáticamente y las rechazaban. Eso ahora no pasa.
-¿Cambios sólo en las formas?
-Van más allá. Mociones como las de aclarar los trámites para el cambio del fútbol se están cumpliendo dos años después. Son cosas normales, que parecen buenas porque veníamos de algo muy malo.
-Hay quien cree que ustedes son una muleta para el gobierno.
-Sólo hubo una votación en la que los apoyamos, que fue en las liberaciones. Si eso se puede llamar sustentar, pues vale. Yo creo que se sustentan solos. Eso sí, cualquier gobierno que avance en democracia nos tendrá al lado. Si lo que van es a buscar meter sueldos en bolso y no hacer nada nos tendrán enfrente. Nos consideramos una oposición responsable.
-Pero favorecieron la investidura de Amparo Antuña (IPÑ).
-El PSOE fue la segunda fuerza más votada y decidieron no mover ficha. Los que facilitaron la llegada de este gobierno fueron ellos. Nosotros no obstruimos. Nos ofrecieron entrar en el gobierno y dijimos que no porque la confianza hay que ganarla.
-¿Por qué aprobaron las liberaciones?
-Consideramos que era una cantidad razonable, lejos de la obscenidad de antes.
-¿Debería haber dimisiones por el tema del plan de empleo?
-No tenemos posicionamiento al respecto como Conceyu Abiertu. Lo que sí sabemos es que hay gente que se alegra de que esto haya pasado para echárselo en cara al gobierno.
--¿Cuáles son sus metas para este mandato?
-Por desgracia muy similares a las de 2011. El PSOE votó sistemáticamente en contra de nuestras propuestas e IPÑ también rechazó algunas antes de su renovación interna. Los pegollos irrenunciables de nuestro proyecto son un reglamento de participación ciudadana y la regularización del uso del asturiano.
-¿Ven al gobierno por la labor de aceptar ambas cosas?
-Sí, se comprometieron a favorecer esas dos peticiones.
-¿Atribuye algún logro a su formación?
-Bueno, podemos estar contentos porque se limpió el río Noreña. En 2011 lo hicimos voluntariamente y este año el Consistorio lo ha hecho de oficio. La presión de algo sirvió.
-¿En qué creen que Noreña debería avanzar?
-El plan general de ordenación urbana debe salir adelante. No es una gran prioridad, pero es necesario para el desarrollo del polígono o constituir espacios dotacionales que permitan desarrollar proyectos cuando haya dinero. Además obligaría a asumir compromisos como una senda fluvial. Eso sí, pedimos que tenga la suficiente difusión y mecanismos de participación.
-¿Se puede hacer más por el matadero?
-Quizás desde el Principado sí. No considero que sea culpa del ayuntamiento de Noreña, porque no veo qué se podría haber hecho para evitar lo que ocurrió con el matadero.
-¿Es fácil preparar un pleno de manera asamblearia?
-Tenemos reuniones semanales para perfilar posturas y el martes previo al jueves de final de mes cuando hay pleno se vota si es necesario el posicionamiento en los puntos a abordar. Puede participar quien quiera y no va nadie a reventar la votación. Permite que la gente se identifique con las cosas que se promueven. Lo hacemos en sitios públicos como gesto de transparencia.
-¿Les ha copiado Podemos?
-El municipalismo asambleario no lo inventamos nosotros, pero ellos tampoco. Fastidia que quieran vender que lo inventaron ellos. La diferencia es que nuestro proyecto es de abajo a arriba y el de ellos a la inversa. Quieren tomar el Congreso y después tener concejales, mientras que nuestro camino es el contrario.
-¿Les cortejó Podemos?
-Que yo sepa no. Conocen nuestra posición y saben que no es participar de su proyecto. No los vemos como enemigos, sino más bien como complemento.
-Ustedes se declaran abiertamente de izquierdas
-No nos escondemos ni nos definimos como comunistas, socialdemócratas ni nada de eso. Somos una izquierda genérica.
-¿Esperaban el resultado que tuvieron en las elecciones?
-Bueno. Parece que la gente está abriendo los ojos.
-¿Su voto es generacional?
-En la lista había gente joven y no tanto. A diario se mueve más la juventud, pero arropada por gente veterana que está desencantada con el PSOE y no ve en IU una opción.
