Viella no tendrá, finalmente, alcalde de barrio. La única candidatura presentada antes del plazo finalizado el pasado 10 de octubre fue finalmente desechada tras recibir el Ayuntamiento de Siero una reclamación verbal por la que se comunicó que el aspirante, David Alonso, no cumplía con los requisitos exigidos al no estar empadronado en la parroquia.

El argumento esgrimido para tumbar la candidatura es admitido por el propio Alonso, quien asegura que se presentó empujado por los vecinos y sin conocer esa condición. "Un grupo de vecinos me animó a dar el paso y siguen apoyándome para que, finalmente, sea alcalde de barrio", apunta Alonso, que duda de que se aplique el mismo rasero en todos los casos. "Tengo constancia de que otros alcaldes de barrio que hubo no cumplían tampoco esa condición", declara.

Si bien la candidatura fue admitida a trámite en un principio y a día 10 de octubre se daba por hecho el nombramiento de Alonso como nuevo alcalde, la reclamación hecha previamente a la ratificación por parte del alcalde de Siero, Ángel García, hace que el puesto quede vacante. "Es una pena porque yo sólo quería ayudar", comenta Alonso, que vive en el límite entre Viella y Lugones, y tiene sus raíces en la parroquia en la que aspiraba a ser alcalde.

El frustrado candidato achaca la reclamación presentada a "falsos rumores" que lo vinculan con formaciones políticas o lo tachan de ser un candidato impuesto por la presidenta de la asociación de vecinos "La Nozana", Sonia Lago.