"Cuando hablamos de la evacuación de Asturias en la Guerra Civil nos viene a la cabeza la salida de barcos de El Musel, en los últimos días de la guerra en Asturias. Pero eso fue lo de menos: fueron muchas más las personas evacuadas en los meses previos, especialmente mujeres y niños". Así desgrana el historiador noreñense Antonio Martínez las conclusiones de su estudio "1937. La evacuación d'Asturies na Guerra Civil. Hestoria y Memoria". Un volumen editado por Espublizastur que se presentó anoche en Noreña.

Este es el tercer libro de Martínez tras "Exiliu Asturianu (1937-1939)" y "Noreña y la sidra. Apuntes sobre la hestoria sidrera d'un conceyu asturianu", trabajo este último con el que obtuvo el premio "Emilio Trabanco" en 2012. En este tercer estudio amplía uno de los aspectos de su investigación sobre el exilio asturiano, centrándose en una cuestión que, hasta la fecha, había sido poco estudiada.

"Entre julio y octubre de 1937 fueron evacuadas de Asturias un mínimo de 57.000 personas. La cantidad exacta es difícil de precisar, pero podría llegar hasta las 76.000 personas. En cambio, entre el 11 y el 12 de octubre, en la gran evacuación de El Musel, salieron entre 11.200 y 12.400 personas", precisa Martínez.

El destino preferente de esas personas evacuadas, continúa Martínez, era la costa francesa, sobre todo Burdeos. Desde ahí, muchos retornaron a España por Cataluña, que era aún territorio republicano. Buena parte de ellos volverían a tierras francesas cuando, poco más de un año después, Cataluña cayó en manos de los insurgentes.