Hace cincuenta años que no se colgaban los instrumentos al cuello, pero desde hace mes y medio las guitarras, bajo y batería del grupo pop "Los Moscones" de los años sesenta del pasado siglo resuenan en los locales de ensayo de La Panera, en Grado. Una vuelta a los escenarios para conmemorar su aniversario, que celebrarán el sábado en un restaurante de la villa, con las entradas ya agotadas. "Tenemos nostalgia y mucha emoción, a eso se suma la dificultad de volver a tocar", señala Míchel González.
Y es que excepto él, que tocaba en casa, y Paquito Estrada que se dedicó profesionalmente a la música ninguno había vuelto a los acordes. "No se olvida porque la guitarra sigue teniendo cinco cuerdas pero hay que ensayar", indica José Emilio García. Los estudios, los trabajos y las mozas terminaron con cinco años de trayectoria del grupo local, que triunfó con sus versiones de "Los Sirex", "Los Mustang" o "Los Salvajes" y sus propios temas.
Así, el sábado volverán a resonar los ritmos pop sesenteros junto a "canciones melódicas para bailar agarrados como se hacía antes", comenta González. Un listado amplio y variado para celebrar cincuenta años del nacimiento del grupo en el que participaron también Manolo Salas, Nardo Rodríguez, Fabián Muñiz, Manolo Lencero y los fallecidos Alberto Bitita y Julio Álvarez. También aprendió con ellos Roberto Sánchez Ramos "Rivi" y apoyó sus conciertos José Luis Fajardo a los teclados, profesor jubilado del Conservatorio de Madrid que puede que asista al concierto.
Un recital en el que tendrán el apoyo de Nando F. Arias y los músicos de la banda punk asturiana "Misiva", quienes les han prestado instrumentos y materiales. "Hay muchas ganas pero también algo de miedo después de cincuenta años sin tocar", comenta Manuel Lazcano, a lo que Salas añade: "Y la emoción de volver a vernos". Y es que el cantante, que vive en Tenerife, lleva un mes y medio en su villa natal para asistir a los ensayos.
Las ganas las tienen todas y esperan que el público disfrute como en los guateques de antaño. "Es una ilusión momentánea porque seguramente no continuemos", concluye González.