Manuel Antonio Menéndez Martínez, fundador de la mítica Pastelería Siola de Pravia, falleció ayer por la mañana, en Oviedo, a los 69 años de edad, tras sufrir una enfermedad. Menéndez, que deja esposa y tres hijos, era muy conocido en el concejo y fuera él, ya que durante veinticinco años fue presidente del gremio de artesanos confiteros de Asturias.

Menéndez fue un hombre hecho a sí mismo. Nació en Villarigán, aunque vivió en Pravia de niño, donde comenzó su andadura laboral como aprendiz de una ferretería. Años más tarde trabajó en Carrocerías Pellauñán, donde llegó a ser uno de los encargados. Sin embargo, él éxito le llegó con la fundación de la pastelería Siola, en 1970. El céntrico negoció creció y cogió fama. Hoy en día se le conoce por sus exquisitas Boroñinas de Pravia. El funeral será hoy, a las 12.30 horas, en la Colegiata de Pravia.