La oposición en Carreño urgió ayer al gobierno socialista a iniciar la revisión del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU), tras la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Asturias (TSJA) que estima un recurso presentado por la asociación de vecinos "Río Espasa" de Perlora. El auto anula el acuerdo de la Comisión de Urbanismo y Ordenación del Territorio de Asturias (CUOTA) por el que se aprobó el planteamiento el 10 de octubre de 2013. Sin embargo, el Principado sostiene que el plan sigue vigente y sólo insta al Ayuntamiento a volver a tramitar el texto refundido. PP, IU y Somos Carreño creen que la orden es insuficiente y exigen no sólo que el documento se apruebe en el Pleno -justo lo que no se hizo en su momento-, sino que también incluya las peticiones de los vecinos del concejo.
En este sentido, el portavoz municipal del Partido Popular, José Ramón Fernández, opina que la sentencia "es contundente al señalar los fallos garrafales que llevaron al PSOE a eludir la aprobación del texto por parte del Pleno". Además, "se apuntan vicios tales como la falta de información pública en el procedimiento seguido, por lo que, como mínimo, hay que llevar a cabo un procedimiento transparente". Fernández pide un planteamiento actualizado para las parroquias de Perlora y Carrió, ya que "no tiene sentido la aprobación de un texto global que deje fuera una parte del concejo". El popular va más allá y solicita la revisión del PGOU "a través de un proceso de participación ciudadana".
Lo mismo reivindica el edil y portavoz de IU, Ángel García: "La revisión del plan es una demanda que llevamos haciendo desde hace años, ya que no se ha tratado por igual a todos los vecinos". Según García, este proceso se debería llevar a cabo "cumpliendo la legalidad y dando los pasos correctos para que no se vuelvan a cometer los mismos errores a los que los gobiernos del PSOE nos tienen acostumbrados". García aboga por recoger la opinión "de todas las partes" y pide al gobierno local que convoque cuanto antes una comisión extraordinaria que informe sobre sus planes.
Por su parte, el portavoz de Somos Carreño, Carlos López, comenta que "el PGOU deja mucho que desear desde el punto de vista de la sostenibilidad, entre otras razones por prever un crecimiento residencial desproporcionado. Se prevé suelo urbanizable para 2.422 nuevas viviendas en un concejo con 6.215 viviendas censadas en 2011, 1.315 de ellas vacías", agrega. López concluye que, "ante la gran cantidad de prescripciones y su calado, la CUOTA no debió aprobar definitivamente el PGOU al completo".
