El Ayuntamiento de Noreña precintó el paso por el tramo de acera contiguo al cuartel de la Guardia Civil de Noreña por la calle Justo Rodríguez después de que el viento provocase el desprendimiento de varios cascotes pertenecientes a una vieja chimenea situada en la parte en peor estado de dichas instalaciones.

Si bien la cubierta del edificio se reparó de manera parcial hace escasos años, hay alguna parte, concretamente la correspondiente a las antiguas viviendas del edificio, que se encuentra en mal estado y precisamente fue en el lugar donde tuvo lugar el desprendimiento que, por suerte, no provocó ningún daño personal.

Fuentes municipales aseguran que existe colaboración entre la Guardia Civil y el consistorio y confían en que los problemas puedan ser resueltos lo antes posible. "Cuando se garantice la seguridad para pasar por la zona reabriremos la acera", comenta el concejal de Obras y Seguridad Ciudadana, entre otras áreas, Pelayo Suárez.

Por otro lado, se descarta que las obras que se están llevando a cabo en la actualidad en dicho cuartel, consistentes en la mejora de los vestuarios de las instalaciones, tuviesen algo que ver en un incidente que se generó en la estructura exterior, mientras que dichos trabajos sólo afectan a la distribución interna de las dependencias.

Este no fue sin embargo el único incidente provocado por el mal tiempo en la Villa Condal, pues también se produjeron desprendimientos en las inmediaciones de la oficina de Banesto y los operarios municipales tuvieron que intervenir para cortar un árbol que se había venido abajo en la calle Sevillana.