El agua no volverá a colarse en las aulas candasinas. La consejería de Educación del Principado de Asturias ha comenzado a reformar la cubierta y la fachada exterior del colegio San Félix para eliminar las filtraciones que durante años atormentaron a la dirección. Tras un largo período de reivindicaciones, el gobierno regional respondió este año con una inversión de 198.528,82 euros, que consistirá fundamentalmente en renovar el envolvente térmico del edificio. La empresa que se encarga de los trabajos es Construcciones Julnat S. L., que se comprometió a incidir lo menos posible en la vida académica del colegio y dejar las acciones más aparatosas para las tardes y las vacaciones.
"Estamos contentos con el ritmo que llevan las obras y cómo se están ejecutando. Para nosotros lo prioritario es la seguridad de los niños y en ese aspecto están cumpliendo. No hacen descargas de materiales en horario escolar y han vallado las zonas de actuación para evitar daños", explica la directora del centro, Begoña García, quien precisa que los trabajos son revisados todos los días por técnicos de la consejería de Educación.
El primer paso fue el cambio de ventanas, que ya se completó en la unidad de Primaria y está pendiente de realizarse ahora en Infantil. "No nos han ocasionado ninguna molestia. Sólo tuvimos que reubicar una clase y durante tres horas, así que estamos satisfechos. Además, están en permanente contacto con los profesores", manifiesta Begoña García. La responsable del colegio San Félix recuerda que las obras habían sido solicitadas ya por la pasada junta directiva. Sin embargo, no fue hasta el curso 2013-2014 cuando consiguieron que un técnico del Principado realizase una evolución de las deficiencias denunciadas, que posteriormente quedaron reflejadas en un informe. A partir de ahí se iniciaron pequeñas actuaciones que no lograron resolver el problema de las filtraciones. Aunque desde el colegio candasín se siguió pidiendo un esfuerzo mayor por parte de la Consejería, no atendieron las quejas hasta junio del 2015 cuando apareció un presupuesto en el Boletín Oficial del Principado de Asturias (BOPA), dedicado a rehabilitar el centro. No obstante, la empresa a la que se le adjudicaron los trabajos falló y hubo que hacer otra vez el proceso, que dio lugar a las actuaciones actuales.
El edificio, ubicado en el barrio de La Cruz, fue inaugurado el 21 de enero de 1997, tras dejar su antigua situación en el centro de la villa marinera. La instalación es de dos plantas y está dotada de varios módulos que imitan la forma de las casas tradicionales. Según explica la dirección del centro, el material estaba agotado y eso hacía que en días de lluvia el agua entrase con facilidad en las clases. Con la actuación del gobierno del Principado de Asturias se pretende proteger la construcción con un aislante hidrófugo que ponga fin a una larga batalla contra las precipitaciones. Los operarios ya han empezado a actuar en el tejado y la fachada exterior de la unidad de Educación Infantil, que está repleta de andamios. Fuentes de la consejería de Educación indican que las obras tienen un plazo de garantía de quince años.
