Pese a la decepción de Festejos con Comadres, los resultados del Carnaval, y especialmente de la jornada del martes, han sido satisfactorios a ojos de la Sociedad de Discobares de la Pola (Sodipo), que trata de impulsar la celebración. En este sentido, el colectivo de discobares local considera que lo que demuestra el resultado contrapuesto de Les Comadres y el Carnaval es una tendencia general de la gente a centrar las celebraciones previas a días en los que no hay que madrugar.
"Se demuestra que hay un cambio de tendencia que afecta al jueves en favor del fin de semana", explica el presidente de Sodipo, Alberto Díaz, que admite que las celebraciones de Comadres en la plaza cubierta no cumplieron las expectativas. "Este año tratamos de respaldar a la Sociedad de Festejos y, pese a la oferta, la respuesta fue inferior", apunta Díaz, que también cree que el ambiente en los locales nocturnos fue "joven y abundante, pero menor que en ediciones anteriores", mientras que el viernes predominó "una clientela más madura".
En la otra cara de la moneda se situó el Carnaval, que el martes culminó con el desfile más multitudinario de los últimos años y el sábado por la noche copó los discobares. "Hubo mucho ambiente, en la línea creciente de los últimos tiempos", indica el presidente de Sodipo, convencido de que las nuevas generaciones no son tan proclives a las salidas en los días previos a las jornadas laborales o de clases como ocurría hace años, en pleno apogeo de la movida dominical polesa.
Otros colectivos no lo ven tan claro. Enrique Meoro, de "Amigos del Roble", señala que "ahora la participación se limita a niños dirigidos por los propios colegios". Meoro lamenta además la pérdida "por distintos intereses hosteleros y demás" del que para él era "uno de los mejores carnavales de Asturias" y achaca el declive a la falta de implicación de la gente. "No hay una organización más allá que la Fundación Municipal de Cultura y ello arrastró a la pérdida de ilusión por el Carnaval de muchos, entre los que me incluyo", añade.
