La Sociedad de Festejos de Lugo de Llanera no es la única que se queja por la fianza de 6.000 euros por posibles daños exigida por la Concejalía de Festejos para la organización de fiestas. La asociación Amigos de Posada ha manifestado, también, su descontento con la actitud de la concejala, Pilar Fernández.
La edil aseguraba recientemente, en la contestación a las críticas de la asociación de Lugo, que en Posada se habían celebrado "unas fiestas idénticas sin ningún problema". Pues bien, el secretario de la asociación Amigos de Posada, Sergio Álvarez, dijo que este colectivo puso el dinero, pero "no fue por gusto, fue porque no teníamos más remedio", apostilla. Tuvieron que poner la fianza para una espicha de primavera que hicieron a principios de marzo para recaudar fondos para las fiestas de El Cruce. "Nosotros lo intentamos de todas maneras, con avales bancarios y todo, pero no les valía. Pusimos los 6.000 euros en efectivo, a última hora, porque lo teníamos ya todo contratado, y si no íbamos a perder mucho dinero", asegura.
La asociación recibió un papel con los requisitos, el plan de emergencia, etcétera, en octubre. "Y cuando hicimos un pequeño proyecto para que nos lo autorizasen, ahí ya nos dijeron que había que poner 6.000 euros salvo que el Ayuntamiento decidiese otra cosa. Eso fue en febrero, un mes antes de la fiesta. Nosotros fuimos a hablar con la concejala, que nos dijo a ver si lo podía arreglar, pero no arregló nada. Nos obligaron a pagar el seguro y a poner los 6.000 euros".
Había otra opción, que era la de contratar un seguro específico para esto, pero Sergio Álvarez asegura que valdría entre 600 y 700 euros, un dinero que el colectivo perdería en cualquier caso.
"Nosotros teníamos el que nos pedían para la fiesta y otro aparte de responsabilidad civil, pero no les valía; pusimos la fianza porque lo teníamos contratado todo, y coincidió que teníamos el dinero, pero no es normal que las asociaciones tengan tanto dinero", subraya.
Voluntad política
Por su parte, el portavoz del PP, Silverio Argüelles, sostiene que el cargo de la fianza es "una cuestión de voluntad política", y que lo que se hace es obstaculizar la labor de las asociaciones que no se quieren plegar a lo que quiera la concejala. Aseguró que en 2012, cuando el PP estaba en el gobierno, hubo una situación similar con una asociación, "que arreglamos directamente con la cobertura del seguro". En opinión de Silverio Argüelles, el problema, más allá de que se pueda solucionar o no con un seguro, es que hay "una falta absoluta de comunicación con las asociaciones y ninguna voluntad de colaboración".
Por su parte, el portavoz de Ciudadanos, Alfonso Cicero, apunta que aunque existe un informe técnico que recomienza la solicitud de la fianza para cubrir posibles daños en un lugar público, entiende que la decisión del gobierno, tras haber consultado a los técnicos, es una decisión política, ya que esos 6.000 euros "no son una cantidad grabada en piedra, y el gobierno puede exigir una fianza menor, para facilitar a las asociaciones su trabajo".
