Saborear y disfrutar para olvidar por un día la corrupción política. Esa fue la consigna que coincidieron en mandar varias de las personalidades que ayer fueron homenajeadas con motivo del día grande de las fiestas del Picadillo y el Sabadiego de Noreña, con la excepción del exministro socialista, José Luis Corcuera, que aprovechó su intervención tras ser investido caballero de mérito de la Orden del Sabadiego para reivindicar la unidad de España.

El que fuera miembro de los gobiernos de Felipe González aseguró estar orgulloso de su país y admitió sentir "lástima y melancolía" a los que quieren "poner en valor intereses regionales" refiriéndose a ellos como "nacionales", además de recordar su vinculación con Asturias. "La primera vez que corrí delante de los grises fue en un homenaje a Llaneza en Mieres", señaló.

Por su parte, Isabel San Sebastián, que recibió el Premio Nacional de Periodismo 2016 además de ser investida dama de mérito, se tomó con humor su nombramiento. "No sé como tomarme lo de llevar el nombre de un chorizo", indicó para luego mostrar su compromiso de "hacer honor al chorizo literal y no a los que toman su sentido figurado".

A ella se sumó el dibujante Julio Rey, que achacó a su vinculación con la corrupción su reconocimiento chacinero. "Sé como trajinar chorizos a la Nóos, a la Gürtel y a la de los ERE", comentó con sorna el artista.

En la misma línea se pronunció el alcalde de la localidad salmantina de Candelario, encargado de pregonar la fiesta y también investido como caballero de mérito. "Defendamos los chorizos de Noreña y Candelario y dejemos de lado los otros", comentó con cierta ironía tras mostrar su disposición a estrechar lazos entre ambas localidades unidas por la historia y la industria chacinera tradicional.

Otros como el propio presidente de la Orden del Sabadiego y el cocinero televisivo Sergio Fernández, también nuevo caballero, hicieron un llamamiento a disfrutar de los festejos. "Saboread la vida porque seréis los más felices del mundo", señaló el experto gastronómico, que previamente ensalzó los productos locales, mientras que el cineasta Julio de la Fuente, igualmente investido por sus méritos, se comprometió a incluir a la villa en sus próximos trabajos.

Unos mensajes que calaron entre el público, que aplaudió las puyas a la corrupción y aguantó en la medida de lo posible el chaparrón caído justo en el momento de la entrega de distinciones, que puso la guinda a los actos institucionales celebrados a lo largo del día. En ellos también se nombró socios numerarios de la Orden del Sabadiego a Juan Manuel Fernández, Enrique Costales y Raimundo Cuesta.

Mientras tanto, la hostelería local tuvo una jornada productiva pese al mal tiempo que hoy aspira a culminar con un lleno para las comidas del mediodía.