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Vecinos de Los Campones reclaman que se saque el tráfico de una urbanización

Un cambio viario tras una obra desplazó la circulación hacia una zona residencial

Los vecinos, ayer, en la curva del inicio de la calle. FRANCO TORRE

Los vecinos de la calle Aquilino Rodríguez "El chico", de Los Campones, padecen desde hace meses un excesivo incremento del tráfico rodado. Una circunstancia que se debe, afirman, a los cambios viarios ejecutados por el Ayuntamiento de Siero durante la obra de urbanización de la avenida de Los Campones, concluida el pasado verano.

Esa avenida, que antiguamente era de doble sentido, ha quedado reducida a una calle de sentido único con la obra. Pero los vecinos precisan que el problema no es tanto esa supresión de uno de los sentidos de la marcha, como el hecho de que se haya dejado esa vía como entrada hacia El Berrón. Una circunstancia que, unida a la configuración del acceso a la localidad desde la carretera general, deja la calle Aquilino Rodríguez "El chico" como la única alternativa de tránsito para los conductores que quieran ir hacia Hevia o hacia el cruce de Buenavista.

"Ellos pensaron en lo que era lo mejor para esa calle en concreto, pero no tuvieron en cuenta el efecto que ese cambio tendría en los tráficos de todo el entorno", afirma Miguel Sánchez. Los vecinos, de hecho, atribuyen la decisión de seleccionar precisamente ese sentido de la marcha en dirección a El Berrón a las presiones de un "líder vecinal" residente en la avenida de Los Campones, que habría instado al Ayuntamiento a optar por esa solución, supuestamente a sabiendas de que el tráfico que habrían de soportar en la calle se reduciría sobremanera.

"Esto no es una carretera o una avenida. Es una calle de una zona residencial, atraviesa una urbanización en la que puede haber niños jugando", sostiene Agustina Castro, alcaldesa de barrio de Hevia, que ha llevado las reclamaciones de los residentes hasta el Ayuntamiento de Siero, sin obtener respuesta alguna hasta el momento.

Los vecinos, de hecho, aseguran que el cambio viario supone un peligro para su seguridad, ya que los vehículos que proceden de la zona del polideportivo y se internan en la calle lo hacen a través de una curva muy cerrada, con poca visibilidad y subiéndose frecuentemente en la acera. Además, el cambio también colapsa la calle en determinados momentos, como a la salida de los niños del colegio.

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