Mateo Irurozqui no tiene problema en vestirse de plátano con tal de dar salida a los productos del colegio Ecole de Llanera. "Si me preguntas por qué vengo así es porque te llamé la atención", apunta este alumno que al igual que otros 408 estudiantes de colegios e institutos de cinco municipios del centro de la región participaron en la plaza cubierta de la Pola en una nueva edición del mercado de cooperativas educativas, promovido por Valnalón.

Eran las diez de la mañana cuando los escolares de Siero, Noreña, Nava, Piloña y Llanera comenzaron a vender todo tipo de productos. "Tenemos pendientes, collares y alguna cosa de la huerta", señalaban los alumnos del colegio público de Granda, que confían en financiar una excursión con los beneficios.

En el caso del colegio Nuestra Señora de Covadonga de Noreña, el fin del mercadeo es solidario. "Destinaremos el dinero al hogar Santa Dorotea de Cajamarca de minusválidos psíquicos de Perú", explicó el profesor José Eduardo Valdés que recordó que llevan nueve años colaborando con este iniciativa a la que el año pasado le aportaron 1.300 euros.

Otros como los usuarios del CAI La Arboleya de Meres pusieron en el mercado el fruto de su trabajo a lo largo de muchos meses. "Vendemos obras de arte de pintura y carpintería por sólo diez euros", señalaron los vendedores que encontraron entre sus competidores más próximos y amistosos a los jóvenes del Ecole. "Tenemos cosas propias como camisetas y este año optamos por productos murcianos", indicó Mateo Irurozqui, que no escatimó en esfuerzos para hacer caja.