Leopoldo López Gil, padre del líder opositor venezolano encarcelado, Leopoldo López Mendoza, participó ayer en la Pola en un acto para pedir la liberación de los presos políticos de su país en el que aseguró que "no hay límites ni fronteras en la lucha por la libertad". Y puso como ejemplo el apoyo dado por Siero "y otros municipios pequeños" para que se resuelva la situación de su hijo y otros opositores.

López se emocionó al recordar los tiempos en los que los españoles emigraban y se exiliaban en su país. "Viniendo para acá me sentí igual que los españoles que llegaron a mediados del siglo pasado a Venezuela en busca de la libertad", declaró mientras le saltaban las lágrimas de emoción.

A continuación, analizó la situación de su país y recordó los motivos que llevaron a Hugo Chávez al poder. "En los ochenta la política dejó de ser deseable para los talentosos y dio opción a los menos capacitados para conseguir algo que no podían alcanzar por su talento", indicó para después asegurar que esa situación dio lugar al populismo de un Chávez al que "se le perdonó" hasta su intentona golpista. Además, recordó que, a pesar de que durante muchos años Venezuela se benefició de los elevados precios del petróleo para obtener grandes ingresos, estos no fueron aprovechados para hacer mejoras. "Deberíamos tener el cielo y lo que tenemos es el infierno", dijo, además de señalar que la situación es tan extrema que "la semana pasada hubo un apagón en el 70% del territorio que provocó la muerte de 125 neonatos que estaban en incubadoras", añadió López Gil.

De igual forma, tuvo un recuerdo para su hijo encarcelado del que dijo que a pesar de su aislamiento "le queda capacidad para pensar y sus ideas están en el aire con los ruidos de los pájaros que oye cada mañana". También hizo referencia a otros tres jóvenes que llevan más de un año en un quinto sótano "sin poder ver el sol". Algo que, dijo, "se pensaba que era cosa de Stalin o Hitler".

Por su parte, el alcalde de Siero, el socialista Ángel García, que hizo entrega de una placa conmemorativa, aprovechó para hacer un llamamiento a "valorar la libertad y democracia".