"La situación es tan mala que la gente tiene miedo de salir a la calle". Así de crudas ve las cosas Eva Marcheño, una de las integrantes de la plataforma cívica "Lugones en pie" con la que un grupo de vecinos de la localidad sierense quiere movilizar a la población para forzar al Ayuntamiento de Siero a poner en marcha varias medidas que terminen con la ola de delincuencia y vandalismo que, aseguran, asola a sus calles en los últimos tiempos.
Robos de carteras y de motos, asaltos con fuerza e incendios provocados son algunos de los sucesos que consideran que se están convirtiendo en el pan de cada de día de una población cuyo crecimiento ha venido acompañado por lo que ven como una lacra de la sociedad a la que quieren hacer frente.
"No podemos resignarnos a que la inseguridad reine en Lugones", proclama Dani Cabal, quien, hace tan sólo unos días, sufrió un robo en su propio establecimiento.
Entre las peticiones que hacen no sólo se encuentra la puesta en marcha de un plan de seguridad, sino que piden que venga acompañado de otras iniciativas, como incrementar la presencia de la Policía Nacional, introducir patrullas a pie de la Policía Local y extremar la vigilancia por las noches y en los días festivos, tanto en la zona urbana como en los polígonos industriales. "Es urgente que se lleve al Pleno y se aborde como prioridad", dice Marcheño.
Para todo ello, varios voluntarios iniciaron días atrás una recogida de firmas que les respalden y en el día de ayer media docena de esos voluntarios recorrió de arriba abajo el mercado semanal en busca de apoyos. "Precisamente, este es un sitio en el que los pequeños hurtos y los robos de carteras están a la orden del día", señalaban, mientras muchos de los que pasaban entre los puestos no dudaban en estampar su firma en los papeles. "Por supuesto que estoy de acuerdo", señalaba una señora mayor en el momento de dar sus datos a la voluntaria María Expósito.
La campaña tuvo un especial éxito, según los organizadores, que apenas necesitaron unos minutos para rellenar varios folios. "En sólo una hora recogimos más de cien firmas", apuntó Dani Cabal, que recuerda que la campaña está en marcha en todo Lugones. "Tenemos hojas repartidas por muchísimos establecimientos locales tanto hosteleros como comerciales", detalla.
Preguntados por las previsiones de apoyo a su causa, dicen tener unas expectativas más que optimistas. "Si todo sale según lo previsto, alcanzaremos al menos las 3.000 firmas", apunta Eva Marcheño, mientras que la también voluntaria Julia Arribas muestra su esperanza en que el esfuerzo merezca la pena. "Lo que no podemos es coger el coche para recorrer cien metros como hacemos actualmente", sostiene Arribas, que niega que las reivindicaciones sean producto de ninguna exageración. "Es algo que detectan todos los vecinos y que nos afecta a todos, bien directa o indirectamente", apunta.
Este movimiento vecinal dice ser fruto del hartazgo por los crecientes sucesos delictivos y vandálicos, así como por lo que consideran falta de soluciones por parte de la administración local. Un movimiento que, si bien llevaba tiempo fraguándose, no se plasmó hasta la semana pasada en una verdadera movilización a raíz de la sucesión de varios hechos, como la entrada de los ladrones a una tienda de productos de segunda mano y la aparición de una furgoneta de reparto y una caseta de labranza totalmente calcinados. Unos hechos que se suman a otros recientes, como la calcinación de un autobús en el mismo punto que la furgoneta y que están siendo investigados por la Policía Nacional.
