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"El jabalí se siente seguro en La Fresneda", dicen los cazadores

Los usuarios de los cotos consideran "una locura" hacer batidas como freno a un problema que "viene de atrás"

Los cazadores de Siero consideran que la realización de batidas en zonas de seguridad como las que se están realizando en Oviedo para poner freno a las visitas de los jabalíes al casco urbano no es una buena solución para hechos como los protagonizados por estos animales salvajes en La Fresneda, donde en la noche del lunes estropearon buena parte del parque de la urbanización.

Es el caso de Diego Noval, socio del coto de Piloña, que achaca las cada vez más frecuentes visitas de los cerdos salvajes a las zonas urbanas al creciente desplazamiento de los animales desde los cotos a zonas más seguras. "El jabalí se siente seguro en La Fresneda y en otras zonas como Cabo Noval en las que no puede cazarse", explica.

No obstante, el propio Noval considera "una locura" la realización de batidas como la que se realiza en Oviedo por las autoridades autonómicas. "No cabe en ninguna cabeza hacer batidas en plena veda cuando los jabalíes están criando", señala el cazador, que vería más lógica la organización de batidas conjuntas con cazadores en otras épocas del año. "Lo ideal sería autorizar cacerías en las zonas de seguridad en plena temporada", añade.

En la misma línea se pronuncia el alcalde de barrio de San Miguel, el también cazador César Solís, que considera ilegales las batidas propuestas en esta época del año. "No tiene sentido promover estas iniciativas cuando a cualquier particular se le podría caer el pelo si mata un jabalí ahora", defiende Solís, que asegura no entender la pasividad de los ecologistas ante una solución que espera que no se lleve a cabo en La Fresneda. "Espero que haya la misma movilización contra estas malas soluciones como las que hay contra la caza", declara.

Por otro lado, cree que el problema del desplazamiento de los jabalíes a las zonas habitadas "viene de atrás" y aboga por soluciones "coherentes" para atajar la elevada población. "Si creen que hay muchos, lo que se debe hacer es aumentar los cupos en la temporada, que va desde septiembre hasta enero o febrero", sugiere este vecino de San Miguel, que también lamenta que sólo se atienda al problema cuando se produce en grandes poblaciones. "Es algo habitual también en parroquias como Bobes o San Miguel", recuerda.

De todos modos, los vecinos de La Fresneda admiten que las batidas no son una solución que hayan barajado hasta el momento y prefieren asumir con humor los continuos daños de sus zonas verdes. "Lo tomamos con filosofía y prueba de ello es que 'Ferinchi' estará muy presente en estas fiestas", comenta el presidente del colectivo vecinal, Óscar Llamas, en referencia al protagonismo que tendrá el jabalí que frecuenta la urbanización tanto en el cartel del Corpus como en las botellas de vino que se repartirán entre los socios. Al mismo tiempo, Llamas reconoce que los daños de los jabalíes en la zona se han reducido considerablemente tras el desbroce acometido por el Ayuntamiento de Siero en el parque.

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