El mercado inmobiliario de Siero cerró el mejor primer trimestre de año desde 2010, después de que se formalizasen entre enero y marzo un total de 87 transacciones en el concejo. Unas cifras que, no obstante, no reflejan la realidad a ojos de los agentes inmobiliarios, que alertan de que el mercado sigue estancado salvo en las operaciones que implican a viviendas procedentes de stocks bancarios.
Según las cifras que recoge el Ministerio de Fomento, esas 87 transacciones son la mejor cifra en un primer trimestre desde 2010, el último año realmente bueno de ventas en el concejo, cuando se formalizaron 134 operaciones. Sin ir más lejos, el año pasado se vendieron 63 pisos en el mismo período, y en 2014 las operaciones se limitaron a 37.
Por tipos, las viviendas de segunda mano siguen tirando del mercado. Un total de 76 de las 87 viviendas vendidas eran usadas, por once nuevas, algo lógico habida cuenta que la construcción se mantiene bajo mínimos. Asimismo, 84 de las 87 eran viviendas libres, y sólo tres eran protegidas.
Mas este repunte estadístico no se refleja en el mercado, según los profesionales del sector. "Es cierto que entre enero y febrero hubo un repunte y se cerraron varias operaciones, pero después el mercado ha vuelto a caer, y no creo que se recupere hasta que pasen las elecciones o incluso el verano", sostiene Higinio Martínez, de la inmobiliaria Factor House de Lugones.
El agente precisa además que ese repunte de principios de año tuvo mucho que ver con la salida al mercado de pisos procedentes de stocks bancarios: "Salieron algunas promociones de bancos que se vendieron bastante. Pero después de eso volvió a estancar y así seguimos desde entonces", sostiene.
En la Pola, sin embargo, ni siquiera los stocks han ayudado a levantar el mercado: "Sí que es cierto que hay una demanda, que los clientes te vienen pidiendo pisos de bancos, porque hay la creencia de que son más baratos. Pero es que en la Pola no hay apenas", explica María Ángeles Rivas, de La Isla Inmobiliaria.
De hecho, Rivas precisa que ese repunte ocasional de ventas que se percibió en la zona occidental del concejo no se ha notado en la capital: "El cierre de 2015 fue mucho mejor que el inicio de año. No cerramos apenas operaciones", sentencia.
En cuanto al precio de la vivienda, los agentes coinciden en que siguen a la baja, aunque hay cierta estabilidad, principalmente porque los propietarios son reacios a reducirlos aún más.
