Casi medio centenar de actores se subirán al escenario en cada una de las dos representaciones que se celebrarán de la obra de los Exconxuraos este fin de semana. Como a principios del siglo XV, cuando los habitantes de Llanera se unieron para rebelarse a la Iglesia por los agravios que sufrían, el elenco de actores -todos ellos amateurs- hace de la camaradería su principal virtud para sacar adelante uno de los actos más reseñables de la celebración estrella del verano en el concejo. Al frente de la producción se encuentra José Ramón Oliva, autor del texto y director de la obra, quien promete "conocer, con rigurosidad y de manera amena, lo que pasó en Llanera con los Exconxuraos".
-Lleva al frente de la representación de los Exconxuraos desde su comienzo, hace ocho años, y cada año la producción ha ido creciendo. ¿No le da vértigo?
-Al igual que la fiesta, la obra no ha parado de crecer cada año. Este año es más grande. En total pasarán por el escenario más de 40 actores, y eso demuestra el compromiso de la gente. Desde un primer momento quisimos que la representación fuese popular, y que no se quedase fuera nadie que quisiese participar. Por ello, en esta edición hay papeles que será interpretados por unas personas el sábado y por otras diferentes el domingo.
-Todos los actores son amateurs. ¿Es un factor que dificulta la producción?
-En primer lugar, hay que decir que no somos una compañía de teatro, sino que lo que hacemos es una representación popular. Por supuesto, todos los participantes son amateurs, se trata de vecinos del concejo o con vinculación al mismo que quieren colaborar en al fiesta. Llevamos un par de meses ensayando con mucho esfuerzo por parte de todos, porque no es fácil juntar a 40 personas; pero se va haciendo. Esta semana ya tocan los ensayos generales y hasta ahora la experiencia está siendo buena. Hicimos unas variaciones en el texto para ganar en rigor histórico y también para que la obra sea más amena.
-El texto, por cierto, también es suyo. Un género bastante alejado del costumbrismo en el que se suele desenvolver.
-Hace ocho años que lo afronté, y fue un reto. Nunca había hecho algo así. Afortunadamente contábamos con bastante información porque son hechos que están muy bien documentados, por lo que había material suficiente con el que trabajar. Una vez obtenida la historia, sólo quedaba elaborar el texto teatral. Empezó siendo una obra más humorística de lo que es ahora, donde intentamos que la historia sea todo lo seria que se merece, aunque luego hagamos una parte más ligera, con el fin de entretener. No hay que perder de vista que actuamos en una fiesta y también hay que divertir al público.
-¿Qué promete al que se acerque al recinto ferial para disfrutar de la obra?
-En primer lugar, que va a saber con rigurosidad qué paso con los Exconxuraos, de una manera vistosa y llamativa; y, sobre todo, que van a poder ver a sus vecinos interpretando papeles que van desde un soldado hasta el obispo.
